Betanzos es centro de turismo cultural y cruce de caminos, tanto del Camiño de Santiago como de la N-VI. José Valentín Díaz e Ysabel Rumbo también se cruzaron en Betanzos. El resultado de la comunión artística de ambos es “Un Mar de Tierra y Papel”, que exponen estos días en el Archivo-Liceo. Las esculturas de ella, catorce piezas en total, y los grabados de él, que suman dieciocho, han seducido a decenas de visitantes en solo cinco días, con sus cerámicas esmaltadas y con sus xilografías con múltiples veladuras; con sus verdes y sus azules, los tierras y algún rojo con el que se atreve Díaz.
José Valentín descubrió el trabajo de Ysabel hace poco más de un año, en la Fundación CIEC. “El mismo día le planteé la posibilidad de una exposición conjunta...”, comenta el grabador de Betanzos. La escultora aceptó, pero le advirtió de que los plazos no eran los mismos que para el grabado... que ella necesitaba su tiempo, sobre todo para el secado. Enseguida se pusieron “manos a la obra”, a buscar un motivo de inspiración común sobre el que empezar a trabajar: el Mar.
“La cerámica ofrece muchas posibilidades, por su combinación, las formas, el color, las texturas...”, explica Ysabel Rumbo.
Las disciplinas son distintas, desde las dos dimensiones de uno a las tres del otro, pero el producto es un diálogo sorprendente, casi escalofriante, donde los cuadros responden a las cerámicas y viceversa, hablando un mismo idioma: el del mar.
La sala abre sus puertas todos los días de la semana, de 19.00 a 21.00 horas las jornadas laborables, y los sábados, domingos y festivos, de 12.00 a 14.00. “Un Mar de Tierra y Papel” puede visitarse hasta el domingo 14.
Estos dos betanceiros, ella de adopción y él de nacimiento, continuarán su recorrido alrededor del área metropolitana al río lado de la ría coruñesa, en Culleredo, donde tienen previsto exponer, poco después de clausurar en la capital brigantina, en el Jardín Botánico de O Burgo.