Rosa López no se olvida de su pasado. Se lo recuerda el twitter cada vez que deja un mensaje y le aparece el número 185 en la pantalla de su PC. Porque esta fue la cifra que se calzó un día para probar suerte en el cásting de un concurso que aseguraba de antemano que la llevaría al triunfo, la joven dice que hasta pensó en tatuárselo. Doce años después, la cantante viene a presentar el séptimo trabajo discográfico al Colón. En una velada el 23 de febrero donde cantará los éxitos de OT junto a los de anteriores trabajos y los nuevos temas, que son sentimientos revestidos de música. Y el resultado de experimentar con la vida y de equivocarse.
confiesa que aprende mucho más que CUALQUIER mujer de 32 años
El álbum “Todo te lo debo a ti” es para la granadina un conjunto de experiencias que va coleccionando desde que se subió por primera vez al escenario. Todo un tiempo en el que Rosa afirma que no ha dejado de aprender: “Creo que lo hago mucho más que cualquier mujer de 32 años”. Ni de ser consciente de haber hecho realidad un sueño: “Esto es algo tan bonito y cursi que no todo el mundo puede decir”.
Ahora que la música le permite vivir de ella, Rosa asegura que seguiría dedicándose a ella aunque fuera gratis porque “soy feliz con ello”. En una carrera donde a cada disco le suma un granito de madurez. Así hasta el final porque “hasta el día que me muera, no acabaré de hacer el disco”.
Rosa hace ahora una parada en el camino para invitar al público a que viaje por los recuerdos igual que lo hace un perfume. Pero a través de la música y en formato teatro. La profesional se acercará así todavía más a la butaca en su primera gira por auditorios. Acompañada de sus músicos habituales y con un equipo técnico que la artista calificaba de “increíble”.
Por su parte, el teatro seguirá caminando en el mes de marzo de la mano de artistas como Antonia San Juan, Pablo Milanés, Millán Salcedo y el espectáculo familiar “No hay pieza en Lazy Town”.