Las plazas de abastos todavía no tienen sardina o, por lo menos, no la tienen en las cantidades que serían habituales a dos semanas de San Juan. Ayer apenas se localizaron unas poquitas piezas porque la mayoría de lo que llegó al Muro fue medianillo. Ante la situación de escasez, los armadores del cerco reconocen estar preocupados por si no la consiguen porque la fiesta coruñesa por antonomasia supone “un ingreso extra importante”.
La sardina sigue desaparecida a estas alturas de mes. Si hasta el año pasado el pescado aparecía en grandes cantidades por estas fechas para surtir a los portugueses en el San Antonio –que celebran al estilo del San Juan aquí–, este año los intermediarios apenas pudieron conseguir ayer unas cuantas cajas de medianillo para trasladar al país vecino.
Esto supondrá una notable pérdida de ingresos para el cerco con respecto al año pasado pero la preocupación principal es lo que ocurrirá de cara a la fiesta patria. “Ampliamos los topes de capturas de 3.000 a 6.000 kilos a la semana pero de la grande no se ve y de la mediana hay muy poquita”, reconoce el representante de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga), Andrés García.
La realidad es que existe gran intranquilidad en el sector “por si no aparece la sardina porque estas fechas suponen un ingreso extra importante pero, además, todo el verano es su época de consumo influye mucho en los ingresos de los pesqueros”.
El temor se fundamenta en que “otros años” a estas alturas “había más sardina; el año pasado hubo en abundancia”. Y es que en lo que va de junio, según las estadísticas de la Consellería do Mar, por la Lonja pasaron 13.105 kilos del producto. Es decir, tan solo se descargó un 15% de lo que se había logrado llevar a subasta en el mismo período de 2015.
a ocho euros el kilo
Ayer de milagro se pudieron ver algunas sardinas en la plaza de Lugo a ocho euros el kilo. En las pescaderías del mercado de Elviña se distribuyó, sobre todo, “medianillo, que es cuando está entre la parrocha y la sardina, a siete euros y pico el kilo”.
El responsable del departamento de cancha de la Lonja, Ignacio Iglesias, explicó que en el suelo solo hubo “unas 300 cajas de medianillo y prácticamente toda se fue para Portugal” para completar las capturas de su flota. La caja más cara, con unos 15 kilos de mercancía, se vendió a 33 euros.
“El año pasado hubo más días de pesca y más mercancía pero este año los barcos no dan con ella y si llega es pequeña [en alusión al medianillo] y viene mezclada con la boga y el cabalón”, resumió. Iglesias confía en que en San Juan haya más cantidad de sardina si bien reconoce que “es inevitable pensar que cada año hay menos”.