La situación actual obliga a hacer toda clase de ajustes y la grúa municipal no es una excepción. Lo que muchos consideran un método de recaudación cumple también un servicio público, al retirar no solo los coches de los infractores, sino aquellos que han sido robados o abandonados, para despejar las calles de obstáculos. Sin embargo, este último aspecto se ha dejado de lado para ahorrar costes: en tres años ha caído a la mitad el número de vehículos robados trasladados por la grúa al depósito municipal, de 160 a 80, lo que el ha contribuido sin duda a que el número de traslados pasara de los más de 1.500 en 2009 a los poco más de mil del año pasado.
La razón es económica, como suele ocurrir en estos casos: el dueño de un vehículo que haya sido remolcado hasta el depósito de O Martinete por una infracción, como aparcar en lugar indebido o en doble fila, debe pagar una multa, lo que supera con creces el gasto del traslado. Por el contrario, el dueño de un vehículo que ha sido denunciado como robado solo tiene que recogerlo en el depósito, sin tener que poner un solo euro de su bolsillo. La conclusión es clara: “El depósito municipal está solo para vehículos que hayan cometido una infracción”, según fuentes municipales.
“Lo que se hace ahora es simplemente llamar al dueño del vehículo sustraído e informarle de dónde se encuentra”, comentan estas mismas fuentes. De esta manera, se evitan los gastos del traslado y, además, el problema bastante recurrente de que el dueño tarde en acudir a recuperar su coche, que sigue ocupando espacio en el depósito. Es una medida análoga a la que tomó en su día la Policía Nacional. “Antes llevábamos a Lonzas todos los coches relacionados con los casos que teníamos, y al final, lo que conseguimos es acumular un montón de chatarra delante de la comisaría”, comenta un agente, que recuerda que en el 091 no tienen tanto espacio como en la Comandancia de la Guardia Civil.
pequeño descenso
Pero que el descenso en los vehículos retirados por robo se deba a un cambio de la política municipal no significa que los robos en sí no hayan bajado. Según la Policía, el número de vehículos sustraídos en A Coruña es ligeramente inferior ahora.
“En muchos casos se ha estancado. Antes nos entraban unos pocos a la semana, ahora apenas tenemos algún caso”, comentaron estas fuentes.