Más de un millar de personas despidieron ayer en Cambre y Carral a seis de las siete víctimas mortales en el accidente del rally de A Coruña el pasado sábado, una pareja que esperaba un bebé y una madre y su hija, así como otros dos jóvenes.
En el siniestro resultaron heridas otras dieciséis personas, de las que once ya se han recuperado, no así una niña de 10 años, que no pudo superar la gravedad de las lesiones y murió en la noche del domingo. Hoy será enterrada en Carral.
Ana y Miguel estaban a punto de tener un hijo pero la fatalidad quiso que ello no ocurriera al ser arrollados, junto a una veintena de personas, por un coche que participaba en un rally.
La iglesia de Cambre acogió el funeral por la joven pareja, trasladada desde el tanatorio en sendos coches fúnebres, flanqueados por una decena de familiares y cubiertos de coronas de flores.
El silencio ha precedido la entrada de ambos en el templo a las seis de la tarde, ante la emoción contenida de un millar de vecinos, amigos, familiares y personas anónimas que han querido acompañarles en su último adiós.
También tuvo lugar el funeral por Laura, en la iglesia de San Juan de Anceis, y Marcos, en la iglesia de Santiago de Sumio.
Sandra y su hija Aroa llegaron en dos coches fúnebres a la iglesia de San Martín de Tabeaio, pasadas las siete de la tarde y los dos fueron recibidas en un clamoroso silencio por centenares de personas, entre familiares, amigos y vecinos de toda la vida.
Alguno de ellos no pudo soportar la idea de darles un último adiós y tuvo que abandonar el cementerio.
apoyo psicológico
La gravedad del accidente ha motivado la asistencia a las familias por parte de los profesionales del Grupo de Intervención Psicológica en Emergencias y Catástrofes (GIPCE), que prosiguieron ayer con esta atención también a los heridos, tanto en los hospitales como en los domicilios donde fueron requeridos sus servicios.
Los efectivos de emergencias que participaron en el rescate se han unido a esta ayuda, como también lo han hecho los psicólogos de la Cruz Roja.
Las víctimas de este accidente han recibido las muestras de pesar y de cariño de los ayuntamientos gallegos, de las diputaciones, de la Xunta de Galicia y del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
Alberto Núñez Feijóo, jefe del Ejecutivo gallego, expresó sus deseos de pronta recuperación a los heridos en el Complejo Hospitalario de A Coruña y compartió sus condolencias y su pesar con los familiares y amigos de los fallecidos.
El Juzgado de Instrucción número 8 de A Coruña, que sigue la investigación de este caso, por el momento no ha fijado una fecha para tomar declaraciones por lo sucedido.