La ministra de Fomento, Ana Pastor, aseguró ayer que las obras de construcción de la línea de alta velocidad ferroviaria en Galicia “están avanzando” y “van por muy buen camino” para concluir en 2018, plazo marcado por su departamento para culminar “en su totalidad”.
Pastor hizo esta valoración durante una visita a la provincia de Ourense –en tres puntos del tramo que une Vilariño de Conso y A Vilavella–, donde supervisó el desarrollo de las obras de construcción de la línea Madrid-Galicia, acompañada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.
Pastor evaluó de manera satisfactoria los trabajos para “una obra emblemática que será referencia mundial del siglo XXI”, según aseguró.
La obra incluye la entrada en servicio en 2015 del tramo Olmedo-Zamora, y muestra “la diferencia de hacer política” con una inversión, “la segunda” más importante en ferrocarriles de España, que supone “un 133% más”, que en el resto de España, puntualizó.
La ministra volvió a enfatizar el compromiso del Gobierno central, presidido por Mariano Rajoy, con la infraestructura ferroviaria en Galicia.
“Vamos a adjudicar más de mil millones de euros de alta velocidad gallega”, comento, y subrayó que se trata de “más de 4.000 millones de euros en lo que llevamos de legislatura”.
Puntualizó que las obras funcionan a “pleno rendimiento”, y ensalzó los avances fruto de un “trabajo ingente” del Gobierno, para trabajos que “prácticamente no había comenzado” con el anterior Gobierno, por lo que “llevaba un retraso considerable”, añadió.
El actual Gobierno ha destinado “más de 2.000 millones a esta infraestructura y ha licitado obras por más de 1.700 millones” de euros, indicó.
El proyecto de Presupuestos Generales del Estado 2015 prevé una partida de 891,4 millones de euros para obras de inversión en el tramo Olmedo-Lubián-Ourense-Vigo del corredor noroeste, con la puesta en marcha de 38 kilómetros de túneles y cuyas obras “se encuentran en ejecución o rematadas”, dijo.
El tramo Lubián-Ourense están “a pleno rendimiento”, el tramo Olmedo-Zamora “está muy avanzado” y del de Taboadela-Ourense ha sido aprobado el estudio informativo, y el Ministerio está llevando a cabo los “trámites” relativos a las medidas medioambientales para modificar el trazado, por lo que espera “continuar para poder encargar el proyecto básico”, precisó la ministra. Una vez concluidas esas obras, señaló la ministra , será posible viajar entre Zamora y Madrid “en 1 hora y 25 minutos”, lo que significará que “Galicia va a estar, en unos meses, media hora más cerca del resto de España” y, por tanto, “de la competitividad”, a pesar de algunas “críticas”, comentó.
En cuanto al resto de infraestructuras gallegas, la ministra señaló que el denominado Eje Atlántico, obra en la que se han invertido en los últimos tres años más de 500 millones, está “muy avanzado”, lo que permitirá “hacer posible que entre Vigo y Pontevedra estemos a 15 minutos y entre Pontevedra a Santiago, en media hora”.
Por su parte, Feijóo resaltó la voluntad del Ejecutivo para “concluir el déficit de las infraestructuras ferroviarias hacia el noroeste”, un compromiso, dijo, “que hasta ahora se constataba en los papeles”, pero que “hoy podemos medirlos en la realidad física de la ejecución material de las obras”. Quedaría pendiente “unir por tren a Lugo y Ferrol con el resto de la columna vertebral de Galicia hacia Madrid”, dijo.
Precisamente ayer, el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, criticó que la Xunta “no se preocupe” por la llegada del AVE” a Lugo, a pesar de que “fue un compromiso del propio Feijóo en elecciones”.