A falta de óperas representadas, la Programación Lírica de A Coruña atenderá a homenajes. El primero tendrá lugar el 3 de septiembre y se hará en recuerdo al cuarto centenario de la muerte de Shakespeare con el estreno en Galicia de “Falstaff”, la última obra maestra firmada por Verdi. La pieza hará coger la batuta a una institución como Alberto Zedda, que la tiene en su altar de favoritas, para completar la exclusiva con la voz de Bryn Teffel, que ya estuvo el año pasado en la ciudad.
Es más, el coordinador de la actividad, César Wonenburger, contó ayer en la presentación que su paso por A Coruña le hizo merecedor del premio al mejor recital de 2015. El segundo plato fuerte será “El barbero de Sevilla”, de Rossini, que cumple 200 años. La interpretará el 17 de septiembre en versión concierto el barítono coruñés Borja Quiza en una entrega, entre agosto y diciembre, donde sonarán las voces de Gregory Kunde, Leo Nucci, Marianne Cornetti y Celso Albelo.
Amigos de la Ópera, en colaboración con el Ayuntamiento a través de la Fundación Emalcsa, la Diputación, el Agadic y el Consorcio para la promoción de la música completa el programa con actividades paralelas como la Lírica Inclusiva, que ofrecerá una serie de actuaciones en la Fundación Padre Rubinos y en Down Coruña dirigidas a aquellas personas que no tienen fácil acceso a los escenarios operísticos habituales.
Esta novedad se unirá a citas habituales como el tercer Curso de Interpretación Vocal de Alberto Zedda y el décimo ciclo de “As novas voces galegas”. Según la presidenta del colectivo, Natalia Lamas, la Programación Lírica se adaptó a las circunstancias y la merma de presupuesto, unos 415.000 euros frente a los 1,2 millones de la edición anterior.
Por esta razón, aseguró que los artistas bajaron sus cachés habituales y la oferta no bajó en calidad. De cara al 2018, que será cuando se cumplan 200 años de las primeras representaciones líricas, la responsable pidió que regresasen las óperas a la escena y, en este sentido, afirmó que Amigos de la Ópera está dispuesto a dialogar. Para Lamas, el género en su máximo esplendor no es un capricho: “La diferencia entre la cantada y la representada supone una oportunidad de empleo además del disfrute del público”. Es por eso que espera volver a contar con el equipo técnico de antaño, con los peluqueros y sastres porque parafraseando al director de la Filarmónica de Berlín, lo que cuesta años levantar, se puede ir a pique en pocos minutos.
Por otra parte, Wonenburger justificó el carácter cómico de los dos títulos por la época convulsa actual: “Estas dos obras maestras nos dan una visión distanciada de las debilidades humanas”. El coordinador, que señaló que para que todo esto cogiera forma contaron con elementos de su festival y de la Orquesta Sinfónica, destacó la actuación de Leo Nucci el 9 de diciembre como el broche final con José Miguel Pérez al mando y la OSG de fondo.
Todavía no hay director confirmado para “El Barbero de Sevilla”, pero sí un elenco donde Quiza estará acompañado por Carlos García, Barry Banks, Bruno de Simone o Burak Bilgil, entre otros.
En “Falstaff”, Terfel se arropará con la fuerza vocal de Ainhoa Arteta, Juan Jesús Rodríguez o Marianne Cornetti. Agosto será un viaje que partirá el 28 de Verdi y aterrizará en Broadway y Celso Albelo confirmará su amor eterno a la ciudad con un concierto en el que celebrará sus diez años de idilio. El Rosalía acogerá el 22 de septiembre a “Nosos Intérpretes”, donde Javier Franco cantará arias y romanzas de zarzuela y Afundación se convertirá en una sala de cine. Allí se proyectará “Campanadas a medianoche” o “Romeo y Julieta” en una nueva entrega, en la que la crítica diseccionará el 1 de septiembre “Falstaff” y el 15, “El Barbero de Sevilla”.