No me dio un soponcio porque Dios no lo quiso, pero me quedé de una pieza y con la mente a cuadros cuando supe que más de 3.300 empleados de las empresas públicas tienen mejor sueldo que el de Rajoy. Estamos hablando de empresas del Estado, para que a nadie le queden dudas. Y conste que lo dice el informe que el Tribunal de Cuentas ha remitido al Congreso. Se indica que cada uno de estos “Amancios Ortega” de vía estrecha, perciben más de 90.000 euros brutos al año. Y ustedes y yo, “a verlas venir”.
Estoy en condiciones de indicarles cuáles son las compañías que otorgan sueldazos a sus felices trabajadores. Helas aquí: AENA, Corporación RTVE, Renfe-Operadora y Navantia. ¿Qué les parece? Pero el tema es más sangrante si les digo que el Tribunal de Cuentas halló cinco entidades sin actividad y con más consejeros que plantilla. Otro ejemplo: Un grupo público deficitario en Cádiz tiene un empleado y ¡12 consejeros! Pero es que hay más, porque el informe alerta de que hay 23 empresas públicas con “actividad reducida”. De donde se deduce que es más que cuestionable la conveniencia de su permanencia en el sector empresarial estatal.
Cabe decir que Rajoy ingresa al año 75.000 euros brutos y creo poder afirmar que se paga de su bolsillo el tinte para teñirse el pelo. O sea, que los 3.300 felices funcionarios de marras hacen pis por encima del sueldo de Rajoy que, además, es víctima de críticas y chanzas, mientras que los “coitados” 3.300 viven tan ricamente en el más prudente de los anonimatos. Y me pregunto. ¿Dónde coño quedó el cumplimiento del solemne anuncio del entonces presidente Zapatero de que se iba a acometer una racionalización del sector público empresarial, con extinciones de sociedades públicas y reducción de su número de consejeros y directivos dentro de un plan de austeridad?
Respuesta: en el quinto cuerno de la luna. Así nos va.