El músico y productor argentino Alejo Stivel será uno de los platos fuertes de las fiestas del Rosario, donde ofrecerá un concierto –mañana a las 23.00 horas en Azcárraga– y una charla titulada ‘El exilio y el rock’. En la conferencia (mañana, 12.00 horas), que tendrá lugar en la casa museo Casares Quiroga, repasará su trayectoria, su propio exilio a España y su relación con una figura imprescindible de A Coruña como María Casares.

Charlará sobre exilio y rock, pero también de su sorprendente vínculo con María Casares.  

Es una relación casi virtual, porque yo era muy pequeño. Mi padre era director de televisión y la contrató, la llevó desde París, donde ella vivía, hasta Buenos Aires para hacer ‘Yerma’. Fue todo un evento en Argentina que doña María Casares, con ese nivel tan internacional, fuese a un programa allí. Pero mi padre hizo ‘Hamlet’ y otras cosas muy importantes en televisión y coincidió que ella pudo venir. Entre los ensayos, la grabación y todo eso creo que estuvo como un mes y yo compartí momentos. No puedo decir que charlé con ella pero me impactó mucho, también por la potencia de esa obra de Lorca.

Personalidad arrolladora y ese característico acento gallego que nunca perdió.

Sí, tenía a Galicia en la sangre.

¿Qué temas tocará en la charla?

Cómo te cambia la vida y el destino un exilio, es algo muy triste y muy negativo pero está en ti sacarle algo positivo. Esto es lo que me ha pasado, a ver qué hago con esto. Hay gente que muere de pena en el exilio, como Antonio Machado, pero hay quien puede rehacerse y salir adelante.

“Básicamente me he reinventado dos veces, la primera como cantante de rock y la segunda como productor; hace unos años volví a cantar, volví a mi primer amor

¿Además de su experiencia personal, charlará sobre algún caso en concreto de otros artistas que han vivido un exilio?

Hablaré de mi caso y de gente a la que le han pasado cosas parecidas, ya sea un exilio político como el mío por mis padres o uno profesional. Artistas a los que no les iba bien en su país y han tenido que emigrar a otros lugares para probar suerte, y algunos han triunfado.

En el ámbito musical, no ha dejado de reinventarse.

Básicamente han sido dos veces, la primera como cantante de rock y la segunda como productor. Es verdad que hace unos años volví a ser cantante otra vez, volví a mi primer amor. Ahora compagino las dos facetas y acabo de producir un disco de Rosa León, que ha estado 30 años sin cantar. Yo estuve 25, me ganó (risas). Es un disco muy bonito con duetos con Serrat, Sabina, Silvio Rodríguez, Víctor Manuel, Ana Belén, El Kanka, Andrés Suárez, Rozalén... En los conciertos repaso las canciones que me han traído hasta aquí, las de Tequila, que me han aportado tanto, y las canciones en mis discos en solitario.

Y ha publicado sus memorias. ¿Fue complicado ese proyecto?

La verdad es que sí, no tengo muy buena memoria y fue un doble esfuerzo, pero ha quedado bien.