El Playa Club, el kiosko de la plaza de Ourense, la cafetería Manhattan, la piscina de San Amaro... Muchas de las instalaciones más emblemáticas de la ciudad son propiedad municipal, que las cede en régimen de concesión, pero nunca ha mantenido un control adecuado. Esto ha generado cientos de miles de euros en pérdidas para las arcas municipales, cuando han dejado de percibir los pagos, y también ha contribuido al deterioro de las instalaciones por falta de mantenimiento. Recién salidos de aprobar una nueva instrucción, la alcaldesa, Inés Rey, y el concejal de Economía y Hacienda, José Manuel Lage, anunciaron que los titulares de las concesiones tendrán hasta el uno de enero para regularizar sus pagos. De no ser así, se rescatarán las concesiones y se licitarán de nuevo, si es que corresponde hacerlo por el tipo de contrato. 

Lage presentó durante su intervención una lista detallada de las concesiones municipales que desde ayer ya se puede consultar en la web municipal. Son 170, de las cuales 66 se ceden gratuitamente a instituciones y 104 son económicas. De estas últimas,  solo 68 están en vigor: aparcamientos,  estaciones de servicio y otros tantos locales hosteleros. Solo la farmacia de Adormideras, señaló Lage, debe al ayuntamiento 500.000 euros, tras muchos años de impago. “Dígoo para que se entenda o que significa ordenar”, apuntó el edil. 

Hay concesiones que se remontan a los años 80 y siguen vigentes. Algunas no se extinguirán hasta 2050. Otras, como el Playa Club, rematarán en 2032. Lo que se busca en cada caso es realizar un seguimiento constante y actuar con celeridad si hay incumplimientos. “É a primeira vez que o Concello reúne a información de todas as concesionarias de forma exhaustiva”, recalcó el edil, que insistió en el “salto” que supone para la transparencia su publicación en la web, al alcance de toda la ciudadanía. 

Un esfuerzo de dos años 

El concejal de Economía y portavoz del Gobierno local alabó el esfuerzo que ha supuesto localizar y ordenar toda la documentación. “Ás veces incluso non foi fácil dar cos actuais concesionarios porque ao longo dos anos algunhas foron cambiando de mans”. Por eso fue necesario crear un departamento específico de concesiones que lleva dos años trabajando. “Cando parecía que rematábamos, dicíanme que aparecera outra concesión”, aseguró el portavoz municipal, que critica la desidia de los gobiernos anteriores, aunque solo los de la Marea y el PP. 

Sin embargo, los populares recuerdan que fue Carlos Negreira quien desveló una larga lista de irregularidades: por ejemplo, que la concesionaria del aparcamiento del mercado de Monte Alto no había pagado el canon durante una década, que nadie le cobró en 35 años el IBI a la concesionaria del Hotel Atlántico o que el concesionario del Remanso tampoco había pagado el canon.

Aparcamientos y ascensores 

Respecto a los aparcamientos, estos son especialmente importantes porque suponen el 30% de las concesiones económicas, así que regularizarlas es vital. Por eso el Ayuntamiento ha puesto en marcha ya el proceso de resolución de los parkings subterráneos de San Cristóbal, Maestre Mateo, María Pita y plaza de Galicia, que volverán a ser licitados.

Pero los parkings tienen, además, que adaptarse a la normativa de accesibilidad, para lo que se ha fijado de plazo hasta el seis de septiembre del próximo año. “O modelo de cidade que se está implantando non é compatible con que non haxa un ascensor”, comentó Lage. 

En efecto, muchos aparcamientos solo son accesibles por escalera, lo que supone una barrera para los usuarios con problemas de movilidad. “Se lle da un ano para que cumpla a normativa. Se non, a concesión é pública. Quen incumpla a norma, quédase sin a concesión. Esto é claro e cristalino”, remató el concejal. 

Además, los titulares de las concesiones deberán presentar todos los años, y siempre en los primeros veinte días de cada ejercicio,  una memoria de la situación actual de la concesión, incluyendo obras e inversiones, dado que el mantenimiento como recordó Lage, es una obligación del adjudicatario. 

Ahora tienen que presentar una memoria sobre los tres años anteriores y una relación detallada del personal con derecho a subrogación. Sin embargo, en el caso de los aparcamientos, a la memoria tendrán que añadir el número de plazas de las que disponen, cuántas están cedidas y cuántas se hallan en régimen de alquiler, además de las adaptadas a conductores discapacitados.

Otra obligación importante que incluye la nueva ordenanza que se acaba de aprobar en Junta de Gobierno local es que los adjudicatarios deben remitir informes anuales sobre cuánto de su personal cuenta con derecho a subrogación. El objetivo es garantizar los derechos de los trabajadores, una vez haya caducado el contrato municipal, y proteger sus empleos. 

Además de aparcamientos, el Ayuntamiento dispone de inmuebles, instalaciones deportivas y locales comerciales, como una confitería en la estación de autobuses o varios establecimientos en San Roque, junto a la plaza de España, de los que en la lista que ha colgado el Ayuntamiento en su página web solo figuran el del número 2 y el número seis, estando el resto cerrados. 

“Gracias aos funcionarios, hoxe damos ese paso, para que todos estes bens públicos repercutan no público, e ademais o facemos con total transparencia”, proclamó la alcaldesa.