Con las grandes superficies comerciales y el Ayuntamiento a punto de encender sus iluminaciones navideñas, la ciudad vivió ayer el tercer día consecutivo con actividad en las playas y estampas de ocio al aire libre y práctica deportiva más propias de la temporada estival que de mediados de noviembre. Es el milagro que una vez más obró el popular veranillo de San Martín, que en esta ocasión duró dos días y medio. 

Por tercera jornada, las temperaturas máximas alcanzaron los 20 grados, con el cielo despejado en las primeras horas. Aunque todas las previsiones ya advertían de que el buen tiempo tenía fecha de caducidad a primera hora de la tarde, los coruñeses volvieron a recuperar su vestuario más cómodo (algunos incluso prescindieron de la parte de arriba) y se lanzaron a caminar o correr principalmente por el Paseo Marítimo. Los más valientes pisaron los arenales y se tumbaron al sol, o incluso aprovecharon para darse el que probablemente será el último chapuzón de 2022. 
Se cerró el veranillo de San Martín, como estaba previsto, a las 13.00 horas. Los nubarrones anticiparon lo que se convirtió en una intensa y continuada descarga de lluvia y dejaron un día oscuro y mucho más triste que en sus primeras horas. No fue hasta entrada la noche cuando la lluvia concedió una tregua. Eso afectó a un tráfico menos fluido de lo habitual para un domingo.

El frío llega para quedarse 
La nubosidad, los chubascos aislados y el descenso de las temperaturas serán la nota dominante de cara a la semana entrante, en la que se antoja muy complicado volver a disfrutar del sol y de los cielos despejados. A lo largo de esta tarde las lluvias serán cada vez más intensas y persistentes, al menos hasta la tarde de mañana, debido a la llegada de un frente frío a primera hora de la mañana.
La oscilación térmica será muy reducida entre las máximas y las mínimas, especialmente a partir de mañana y pasado, con tres grados de diferencia. De momento, a poco más de un mes para el invierno, los termómetros se mantendrán siempre por encima de los doce grados. l