El pasado fin de semana, fueron puestos en libertad cuatro sujetos, tres hombres y una mujer, a los que las autoridades consideran sospechosos de una ola de ladrones de joyas que se habían producido en distintos puntos de la comunidad gallega, entre ellos la ciudad herculina. La investigación de esta banda la estaba llevando a cabo la Guardia Civil, en la operación ‘Espiño’ pero la detención de un sujeto de la Policía Nacional en Vigo precipitó la situación y debido a lo que fuentes bien informadas califican de “falta de colaboración” por parte de la Policía Nacional, la jueza puso en libertad a los sospechosos. 

En diciembre se había descubierto la presencia de este grupo itinerante, procedente de Cataluña, precisamente cuando estaba actuando en casas del entorno de A Coruña pero, en ese momento, no se les pudo detener. En cambio, obtuvieron una información: una placa de matrícula que volvió a aparecer a mediados de este mes. La investigación de la Policía Judicial de la Guardia Civil permitió localizar de nuevo el vehículo y el escondrijo de los delincuentes, un piso en al ciudad olívica. También localizaron el zulo donde los delincuentes guardaban su botín de joyas robadas. 

Demanda de información

Hace unos días, la Policía Nacional detuvo a uno de los sospechosos por intento de robo y cuando los investigadores de la Guardia Civil se enteraron, se pusieron en contacto con ellos, demandando información (robos de casas en su demarcación) para poder detener a toda la banda e imputarles todos los delitos, así como para devolver las joyas a las víctimas. 
 

Pero, según estas informaciones, la Policía Nacional no colaboró. El resultado fue que la jueza de guardia no encontró ninguna razón para enviarlos a prisión preventiva y todos los sospechos fueron puestos en libertad.