El Ayuntamiento renovó este mes el contrato de la empresa Orion, que gestiona la Oficina Virtual del Grafiti. Esta ha sido una de las herramientas más importantes del Gobierno local contra la suciedad en las calles en el pasado mandato. Se inauguró en junio de 2021, por la anterior concejala de Medio Ambiente, Esther Fontán y, desde entonces ha conseguido borrar  20.700 pintadas. 

Si se tiene en cuenta que en todo el primer mandato y hasta fecha reciente, se han limpiado 26.000 grafitis en total, se comprende que la oficina ha permitido multiplicar el número de intervenciones hasta más del triple. Se trata de un trabajo constante, pero que ha permitido realizar avances significativos en varios distritos de la ciudad, que se consideran prácticamente libres de pintadas. Por ejemplo el distrito 10 (Visma, A Silva, A Grela y O Ventorrillo), el 9 (Feáns, Mesoiro, Novo Mesoiro y A Zapateira) 7 (A Gaiteira, Elviña, O Castrillón y Eirís) y por supuesto, el 1 (Ciudad vieja y Pescadería). Zonas tan emblemáticas como la calle Real permanecen limpias desde hace un año e incluso la emblemática calle Orzán, donde en algunos muros había pintura de varios centímetros de espesor, está prácticamente libre. Todo eso es cosa del pasado. 
 

La lucha contra lo grafitis, como tal, comenzó en 2018, cuando el Gobierno de la Marea Atlántica contrató a Orion Analistas para estudiar las pintadas que se hacían en las paredes y recopilar datos suficientes para sancionar a los vándalos. A esa época pertenecen famosos grafiteros con nombres como ‘Asma’, o ‘Goas’ que parecían omnipresentes en las paredes de la ciudad.  
 

A día de hoy, todos estos artista del sprai están retirados. La Concejalía de Medio Ambiente contactó uno por uno con ellos y gracias a las pruebas grafológicas recogidas por Orion, pudo convencerles de que abandonara su actitud. Aunque aparecen de vez en cuando algunos nombres nuevos, la Oficina del Grafiti permanece vigilante para descubrirlos e identificarlos.
 

Colaboración ciudadana 

Aunque los grafitis siguen apareciendo incluso en zonas donde se consideran erradicados, se eliminan en 48 horas gracias a que los coruñeses están al tanto, y alertan al 010 en cuanto descubren uno. En algunos casos, como en el de los edificios más importantes o si la pintada es ofensiva, los operarios del servicio de limpieza actúan de manera aún más rápida. La colaboración ciudadana se considera indispensable. 
 

Una encuesta de este año de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) sobre la limpieza callejera señaló que la ciudad ha mejorado bastante en este sentido: la satisfacción había subido once puntos desde 2019 cuando se realizó la última encuesta. La entonces edil de Medio Ambiente consideró que esta mejora se debía en gran parte a la eliminación de las pintadas de las paredes.