Que A Coruña haya estrenado su primera escuela de magia el Día Internacional de Harry Potter no puede ser casualidad. El mago coruñés Kiko Pastur, junto a sus homólogos Joshua Kenneth y Marcos Waldemar, inauguraron ayer La Llave Encantada, que también cuenta con tienda de artículos mágicos y programará espectáculos a pequeña escala.
Pastur, que regenta el exitoso Museo de Magia de Galicia en Santiago, asegura que el proyecto le rondaba la cabeza desde hace años: “Soy coruñés y buscaba que mi ciudad tuviese un lugar especial. No hay nada parecido aquí y pretendemos que La Llave Encantada se convierta en punto de encuentro para todos los amantes de la magia”, explica el ilusionista, que tiene más de 25 años de carrera a sus espaldas –“Luis Piedrahita, mi hermano Román, que también es mago, y yo íbamos al mismo colegio y empezamos juntos”, asevera–.
Para emular a Juan Tamariz tienen disponibles cursos de magia para todas las edades, con grupos reducidos –de 4 a 6 personas–. “Puede pensarse que la magia solo interesa a los niños pero ya nos han pedido información muchos adultos, incluso jubilados. Queremos darle prestigio a este arte porque la magia abre la mente y entrena habilidades como la oratoria o la capacidad de persuadir”, dice Pastur.
Hoy mismo comienzan las clases y los interesados pueden obtener más información en la web lallave-encantada.com o seguir en Instagram a @lallave_encantada. A Coruña, cuenta el mago, “tiene una gran tradición en esta disciplina”: “La Sociedad Coruñesa de Ilusionismo llegó a tener cerca de 40 integrantes. Es un arte precioso y trataremos de que pasen por la ciudad magos de todo el mundo”, concluye.