La Feira das Marabillas vuelve a la vida el próximo fin de semana. Desde el 21 al 25 de julio la Ciudad Vieja acogerá de nuevo su principal actividad de dinamización comercial, una tradición que en esta edición cumple 26 años, tras haber interrumpido su desarrollo desde 2020 por la pandemia. Habrá cerca de 200 puestos, tan solo quince menos que en 2019, y estarán repartidos por el casco histórico con más espacio de lo habitual. “Por fin se recupera este evento con la intención de que el barrio no solo sea residencial”, asegura el presidente de la Asociación de Comerciantes de la Ciudad Vieja (Aceca), Adolfo López, quien confía en que el buen tiempo acompañe durante los cinco días, ya que su celebración supone el gran empujón anual que necesitan los establecimientos de la zona.
El día 21, jueves, tendrá lugar la gran inauguración de la feria a las 12.00 horas. La plaza de Azcárraga será el escenario del pistoletazo de salida, que también compartirá protagonismo con María Pita, a las 13.30 horas, cuando el Recuncho das Pícaras abra sus puertas para recibir a los más pequeños. Este será el espacio para acoger a un público más familiar, por lo que estará acotado para la seguridad de los niños.
Allí habrá talleres de demostración de mercaderes artesanos, sillas voladoras, una noria, ajedrez gigante, camas elásticas, un campamento, exposiciones, atracciones, tiro con arco, un castillo y guardería. En espacio lúdico infantil no faltarán los espectáculos, juegos y marionetas. Además, como novedad más destacada, ‘Ashdrok”, el árbol sabio, ofrecerá cuentacuentos diarios a los visitantes, y
‘Títeres’ será el encargado de ofrecer obras de teatro y shows de circo.
El jueves, a las 21.00 horas, la Iglesia de Santiago contará con un encuentro de música medieval, y todos los días de la feria, en el Arquivo Reino de Galiza se podrá visitar la exposición “Envíame una postal”, de García Garrabella. Para cerrar los cinco días de actividades, la Colegiata de Santa María será el lugar escogido para la representación teatral, a las 21.00 horas, de “La Casa de Bernarda Alba”, de la compañía Noite Bohemia.
Para acceder al recorrido medieval se habilitarán varias entradas. Además de la plaza de María Pita, los visitantes podrán entrar por la calle de Herrerías, Maestranza y San Carlos. No faltarán tampoco las actuaciones medievales por la calle. El jueves 21, desde las 13.00 horas y hasta las 22.00, los encargados de animar el ambiente recorrerán las calles y plazas con sus características vestimentas. Shows de circo y fuego, faunos, danza del vientre y zancudos son algunos de los platos fuertes que se podrán encontrar los ciudadanos a lo largo de la feria. El viernes 22 estarán desde las 11.30 hasta las 22.30 horas; el sábado, de 12.00 a 22.00 horas; el domingo, de 11.30 a 21.00; y el lunes 25, de 11.30 a 21.15 horas.
Los puestos que conformen el mercado estarán distribuidos con una mayor separación para que haya menor concentración en ciertos puntos del casco viejo y, como novedad, la calle del Rosario también contará con la presencia de los comerciantes. Este año la Feria Medieval pasa de durar seis días a cinco, pero la ilusión de los comerciantes no se detiene y esperan que los coruñeses respondan bien a la cita.