O Ventorrillo pide la recuperación del festival de arte urbano en el barrio

O Ventorrillo pide la recuperación del festival de arte urbano en el barrio
El mural situado en un muro del colegio de María Barbeito recordó a los vecinos una antigua iniciativa | Mónica Arcay

Que el arte llama al arte y la creatividad despierta lo que las generaciones actuales describen como ‘flow’ parece haberse convertido en máxima en O Ventorrillo, donde el diseño del gran mural en un lateral del colegio María Barbeito ha despertado una especie de añoranza de tiempos pasados. Al menos ese es el sentir de la asociación vecinal del barrio, que ya se ha puesto manos a la obra para recuperar el festival de arte urbano celebrado hace 12 años.


Es el diseño que preside el número 28 de la calle del Alcalde Salorio Suárez una de las seis caras visibles del festival Istmo, del que O Ventorrillo desea tomar el relevo. “Nos ha dado una idea, que le plantearemos próximamente a la concejalía de Cultura”, reconoce el vicepresidente vecinal, Aníbal Rodríguez. “Queremos recuperar el festival celebrado hace unos doce años, ahora que tenemos muy presente el contacto con los artistas urbanos”, añade.
 

A pesar de que los residentes y su agrupación representativa funcionarán como nexo con el Ayuntamiento, se trata principalmente de una ola que buscan mantener Brais, uno de los artistas del barrio, así como Cristina Lois, Amabel Troncoso, técnico superior de Museos y especialista en arte urbano y Manuel Batista, DJ Soul and Funk y skater “de segunda generación”, como definen los vecinos. “Se pusieron en contacto con nosotros para ponerse a nuestra disposición y retomar aquel festival; desde luego, el Istmo ha removido los recuerdos de muchos que desean dar a la iniciativa un carácter ‘ventorrillés’”, explica Aníbal Rodríguez, muy próximo también al mundo del patín y consciente por lo tanto del crecimiento de la especialidad en la ciudad. Por ejemplo, la pista de patinaje se ha convertido en protagonista en Novo Mesoiro.
 

Emplazamiento 

Los vecinos y los promotores tienen el concepto, pero también el emplazamiento: la plaza de Salvador de Madariaga. “La decisión viene marcada por el espacio, pero también para reivindicar la ansiada reforma del bowl, mal construido desde un inicio, según nos han transmitido los propios skaters”, subraya el vicepresidente vecinal, que en los próximos días dará traslado de los pormenores a los representantes municipales.
 

Por otra parte, la asociación vecinal de O Ventorrillo ya ha mantenido recientemente reuniones con los responsables del polideportivo del Agra con la vista puesta en la próxima articulación del barrio de Visma, con una urbanización que incorporará varios miles de viviendas en el área. En ese sentido, los vecinos también buscan una apuesta decidida por el deporte y que el pabellón del Agra dé cabida a esa demanda potencial de usuarios. 

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