El Ayuntamiento de Betanzos (A Coruña) ha completado este martes un plan de limpi

eza y desinfección de su red de agua tras cerca de medio millar de casos de gastroenteritis entre su población y a la espera de confirmar que el virus ha desaparecido de su sistema para volver a permitir el consumo.

Los casos empezaron hace diez días, si bien no se detectó el virus en el agua hasta el pasado viernes por la noche, lo que llevó al Ayuntamiento a restringir la ingesta de la misma y ahora espera que la Consellería de Sanidade confirme que el abastecimiento es apto para el consumo.

La alcaldesa en funciones de Betanzos, María Barral, ha informado en rueda de prensa de que el primer aviso le llegó hace dos domingos, cuando le notificaron que había 60 personas con gastroenteritis en la zona, lo que se vinculó con el agua al no haber ningún elemento en común.

"Entonces se busca presencia de bacterias y los resultados dan bien", ha detallado la regidora, que ha matizado que posteriormente, ante la subida de casos, se buscaron virus en el abastecimiento, que se encontraron el viernes por la noche.

Esta situación hizo que se establecieran "restricciones a la hora de la ingesta de agua", pues el número de contagios llegó a 440 según "el último dato conocido".

El Ayuntamiento estableció entonces un "plan de limpieza y desinfección de la red", que concluye hoy con un certificado y con "la máxima rapidez".

Sin embargo, la alcaldesa ha asegurado que el virus no solo está en el suministro a través de la red, pues también se detectó el virus en una "fuente natural que no está conectada a la red y que se nutre de un manantial".

Durante este tiempo, el Consistorio ha repartido agua embotellada entre los vecinos y ha distribuido tres camiones cisterna con agua potable.

Mañana está prevista otra reunión con la Xunta de Galicia en la que Betanzos debe explicar las medidas adoptadas y la situación actual, en la que todavía no se permite el consumo de agua de la red.

El Ayuntamiento asegura que la red ya ha quedado limpia, pero espera comprobar si el río Mendo, del que se abastece, está todavía contaminado.

Fuentes del Gobierno gallego han asegurado a EFE que ya ha realizado analíticas para constatar si el virus ha desaparecido, a la espera del resultado.

Aclaran, no obstante, que la responsabilidad legal del abastecimiento es del Ayuntamiento y, si bien la Xunta colabora para encontrar el origen, el proceso de potabilización, que debe garantizar la calidad del agua, ahora mismo en cuestión, corresponde al Consistorio.