El Balneario de Arteixo vuelve a llenarse de actividad. Tras finalizar la primera fase de la reforma del inmueble, que ha dispuesto un total de 1.800 metros cuadrados para los vecinos, el edificio retoma su esplendor con una ludoteca y una zona verde con graderío en la que realizar eventos al aire libre. La idea, afirman desde el Gobierno local, es crear un espacio de convivencia para todas las edades.

El Ayuntamiento formalizó en 2020 la compra del recinto con fondos cedidos por la Fundación Amancio Ortega y a inicios del año pasado llevó a cabo la demolición de los elementos interiores y la retirada de enseres de las antiguas habitaciones del hotel, las cocinas y el bar, entre otros.

Termas públicas
En una nueva etapa de obras se adecuarán el segundo y el tercer piso del edificio principal, así como el inmueble anexo de una sola planta, donde funcionarán unas termas públicas.

El municipio busca recuperar su pasado como capital de las aguas termales en la comarca y su alcalde confía en poner en marcha en el futuro en Loureda un complejo similar al de A Chavasqueira, en Ourense. “No hay nada parecido en los municipios de esta comarca y estamos convencidos de que tendría mucho éxito. Arteixo siempre ha sido conocido por sus aguas medicinales, especialmente por su Balneario”, apuntó Calvelo en su momento.

El desnivel con el que cuenta el jardín ha sido utilizado para crear una grada, con idea de programar eventos musicales o lúdicos, y se han modernizado las zonas verdes. El edificio principal contará también con biblioteca, sala de conferencias y aula de estudio para los jóvenes, asegura el Ayuntamiento, que también incluye en el proyecto obras en la antigua capilla del Balneario.