Arteixo ha recogido en lo que va de 2023 un total de 22 kilos de papel y cartón por habitante, incrementando las cifras registradas en años anteriores. El municipio acaba de alcanzar los 250 comercios y locales de hostelería adheridos al sistema de recogida puerta a puerta, un servicio que puso en marcha el Ejecutivo de Carlos Calvelo tras municipalizar la actividad en 2018.
El Ayuntamiento anima a los negocios y establecimientos a integrarse en esta red, que ha permitido incrementar las cifras de reciclaje en la localidad. Así, hace cinco años se recolectaban once kilos anuales por vecino y actualmente son 22. El servicio puerta a puerta supone unos 155.000 kilos de cartón al año, mientras que en los contenedores azules se recaudan unos 550.000 kilos anuales.
Según explica el Gobierno local, además de los beneficios medioambientales que proporciona el reciclaje, “el municipio recibe compensaciones económicas a través de Ecoembes por el número de contenedores instalados y por la venta del papel y cartón recogido, que está referenciado a las bolsas internacionales y que suele presentar importantes oscilaciones, que pueden ir de los 18 a los 150 euros por tonelada, dependiendo sobre todo de las necesidades de la economía china, que tiene mucha influencia en los valores mundiales del cartón”.
Arteixo hace un llamamiento, también, para que los usuarios introduzcan doblado el cartón en los colectores y no dejen las cajas fuera, “ya que eso provoca que cuando llueve se estropeen y no sirvan para reciclar, además de provocar un efecto llamada que se materializa en la aparición de más basura fuera de los contenedores”, reconocen.
El Ayuntamiento añade que continúa reforzando las isletas de cinco contenedores con recipientes de más tamaño para el papel. Cuando Arteixo asumió la recogida de residuos hace un lustro, los colectores azules instalados tenían una capacidad de 2.400 litros y en el 2021 empezó a cambiarlos progresivamente para que alberguen hasta 3.000 litros de papel y cartón.
Las actuaciones municipales siguen encaminadas a incrementar las tasas de reciclaje en la localidad, para lo que también programan cada cierto tiempo campañas informativas o charlas escolares para concienciar desde pequeños a los vecinos.