Que no se diga que Kiko Rivera no es un hombre de palabra. Prometió que vendría a la ciudad si el Deportivo ascendía y ya hay fecha para su actuación: el 5 de octubre. El cartel, con fondo blanquiazul y piña en el centro, no deja lugar a dudas. Si al día siguiente, en el partido contra el Málaga, notan a la afición de Riazor algo cansada, será que la fiesta fue un éxito.