El puente sobre la vía del tren en Bollo permanecerá cerrado al tráfico los próximos meses. Esta situación se debe a que el pasado 1 de marzo un vehículo pesado -todo apunta a que se trataba de un camión cargado- atravesó este puente, haciendo caer algunas piedras del pretil sobre la vía del tren.
Este accidente provocó que el puente quedase inutilizado para vehículos de cualquier tipo, permitiendo el paso únicamente a los peatones. El paso de vehículos pone en riesgo la integridad del puente, ya que podría causar todavía más daños y poner en riesgo los trenes que circulan por debajo.
Su reparación completa obliga a cumplir los parámetros que exige el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF) para mantener la seguridad para la circulación ferroviaria. La actuación tendrá un coste de entre 50.000 y 80.000 euros, lo que requiere un proyecto técnico.
El gobierno local de Miño condena la actitud del conductor que causó los daños, pues abandonó el lugar sin dejar sus datos, lo que conlleva que los costes de la obra vayan a recaer en el Concello.
Además, hace unos días, alguien movió las piedras que impedían el paso de vehículos por el puente, lo que podría provocar nuevos derrumbes sobre la vía férrea.
Debido a esta situación, el Concello de Miño informa de que está prohibido mover los obstáculos que impiden pasar por el puente, así como el paso con cualquier tipo de vehículo.
La reparación y recuperación del uso del puente se demorará al menos unos meses debido a la complejidad de la obra, al requisito indispensable de tener un proyecto específico, a la necesidad de la aprobación de ADIF y a la dificultad de buscar financiación.
Desde el Concello ruegan compresión a las personas afectadas, al tiempo que hacen un llamamiento a los vecinos para que se pongan en contacto con el Concello cuando sean conscientes de alguna infracción para evitar que situaciones similares en el futuro.