Culleredo lucha por salvar la palmera de la plaza de la iglesia de la plaga del picudo rojo

Culleredo lucha por salvar la palmera de la plaza de la iglesia de la plaga del picudo rojo
Palmera de la plaza de la iglesia de Vilaboa afectada por el picudo

La plaga del picudo rojo sigue afectando con dureza en la comarca. El Concello de Culleredo, desde su servicio de mantenimiento de árboles y jardines, está realizando en los últimos años un importante esfuerzo para proteger a las palmeras del municipio, que siguen siendo el objeto de afección de un insecto muy difícil de frenar. En el análisis exhaustivo que se está llevando a cabo se acaba de comprobar que otro de los ejemplares más significativos de Culleredo está afectado por el picudo. Se trata de la palmera de la plaza de la iglesia de Vilaboa, de unos 20 metros de altura.

 

En la copa se observa la incidencia del picudo rojo con la carencia de ramas y hojas en uno de los lados. El ejemplar, al igual que el resto de palmeras de las zonas públicas del municipio, fue tratado mediante endoterapia, una inyección que funciona como una vacuna, y con ducha de nematodos, una actuación directa sobre el insecto.

 

Ahora se ha vuelto a realizar otra ducha de nematodos para tratar de frenar el avance del insecto y salvar la palmera. La meta se antoja complicada, explican los técnicos del servicio, tal y como se puede comprobar en los árboles que está atacando esta plaga.

El problema es que su efecto -las dejan secas- se nota prácticamente de un día para otro. Esto implica un riesgo para la seguridad de las personas y por eso el Ayuntamiento está desarrollando este plan de vigilancia continua.

 

En Fonteculler, otra palmera de envergadura, la plantada junto a la Policía Local, la antigua Villa Lucinda, no está resistiendo el avance del picudo. El año pasado, además de los tratamientos de endoterapia y nematodos, se realizó una cirugía apical, pero la plaga no ha dado tregua. Los servicios municipales prevén retirarla próximamente por estar en una situación irreversible.

 

Y otros dos ejemplares más pequeños fueron quitados hoy por estar en un estado irrecuperable a causa del picudo. Uno se encontraba en la urbanización Tierno Galván, en Acea de Ama, y otro en el paseo marítimo de O Burgo, en la zona de Os Templarios.


El Concello de Culleredo continuará extremando las medidas de control de plagas y estado del arbolado para adoptar todas las actuaciones en su mano que frenen su incidencia en el municipio. Asimismo, pide a los propietarios de fincas con palmeras, especialmente las que lindan con espacio público, que adopten las actuaciones oportunas para evitar riesgos.

 

 

 

Culleredo lucha por salvar la palmera de la plaza de la iglesia de la plaga del picudo rojo

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