La de Rubén de la Barrera es una historia de ida y vuelta que deja en evidencia a todos los estamentos del club. La decisión de recuperarle para la causa dos años después de haberle dado puerta deja en evidencia a otras parcelas porque supone el reconocimiento de un error, una asunción de culpa que abre una crisis fuera de los terrenos de juego.
El preparador coruñés había estado en el Deportivo en la temporada 2020-21, la última de Segunda B, tras el cese de Fernando Vázquez.
Entonces tardó cinco partidos en lograr la primera victoria y cerró su etapa el 9 de mayo de 2021 con siete triunfos, tres empates y cinco derrotas.
De la Barrera no logró clasificar al Deportivo para la lucha por el ascenso en la segunda fase de aquella temporada marcada por la pandemia. En lugar de luchar por subir, tuvo que, primero, evitar el descenso directo a Segunda RFEF (en la mente de todos aquel partido con el Pontevedra al que llegó contra las cuerdas el 7 de marzo de 2021) y, más adelante, confirmar la plaza en la nueva Primera Federación (lo lograron el Depor y el Racing pero no el Numancia, que cayó a Segunda RFEF).
Dos años y una semana después de su último encuentro con el Deportivo, Rubén de la Barrera regresa a casa y debutará ante el Algeciras el sábado en Riazor.
Su objetivo será amarrar la plaza de playoff de ascenso y tratar de llevar al equipo de nuevo al fútbol profesional después de tres temporadas en la categoría de bronce. Con ese mismo objetivo iba a seguir en el Deportivo en la temporada 2021-22 en Primera Federación, pero entonces un flirteo con la UD Las Palmas llevó al conjunto coruñés a romper las negociaciones para su renovación y a contratar a Borja Jiménez.
En ese momento ya estaban al frente del equipo los mismos responsables que ahora: Antonio Couceiro al frente del Consejo de Administración, y David Villasuso como director general. Carlos Rosende era un recién llegado a la secretaría técnica. Él fue el encargado de hacer las entrevistas a los aspirantes a suceder a de la Barrera, un casting en el que no participó Richard Barral, quien vivía sus últimos días como director deportivo blanquiazul, alejado ya de la toma de decisiones, tanto de la negociación con De la Barrera como del fichaje de Borja Jiménez.
Los caminos de De la Barrera y el Deportivo de Jiménez se cruzaron a la conclusión de la campaña pasada en el Estadio Abanca-Riazor en la final de la promoción de ascenso: con el Albacete y en la prórroga (1-2) dio el ascenso a los manchegos en la casa de un Depor al que le valía el empate.
A pesar de lograr el propósito de devolver al Albacete al fútbol profesional, el entrenador decidió poner fin a su etapa en el Carlos Belmonte.
Después de no haber entrenado esta temporada a ningún otro equipo, el Deportivo le ha llamado para regresar hasta el final del presente curso y, como mínimo, uno más.
Sorprendente
Sorprende el regreso de Rubén de la Barrera después de todo lo que pasó hace dos años y también, aunque menos, el cese de Cano teniendo en cuenta las palabras del presidente del club, Antonio Couceiro, la semana pasada, cuando le avaló en una comparecencia sin aceptar preguntas de los medios de comunicación tras un acto suyo como presidente de la Cámara de Comercio de A Coruña.
Solo unos días después, la derrota en Linares tras llegar con dos goles de ventaja al descanso y la reacción de la masa social del Deportivo supusieron el final de la etapa del granadino en A Coruña.
Detrás quedan 29 encuentros de liga con Cano en el banquillo y un balance de catorce victorias (48 %), nueve empates (31 %) y seis derrotas (21 %).
Curiosamente, los porcentajes del granadino en su paso por el Deportivo mejoran los de la primera etapa de Rubén de la Barrera en A Coruña, en la que el nuevo míster blanquiazul firmó un 47 % de triunfos, un 20 % de empates y un 33 % de derrotas.
Los dos tenían en común, como vuelve a pasar ahora, que las plantillas se confeccionaron sin ellos, aunque en ambos casos estaban ya en los equipos en el mercado invernal.
Futuro
Con todos los estamentos del club señalados, en las próximas semanas podrían producirse cambios relevantes y la incorporación de un director deportivo que, inicialmente, estaba descartado hasta que el Depor ascendiera.