Una veintena de funcionarios de la administración de justicia abucheó ayer a la ministra del ramo, Pilar Llop, a su llegada a una entrega de premios en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) al grito de “un mes de huelga sin negociación”, para echarle en cara los acuerdos alcanzados con otros colectivos del sector –LAJ, jueces y fiscales– mientras ellos siguen esperando el inicio de las conversaciones.
“Un mes de huelga sin negociación”, “Justicia clasista, Gobierno socialista” y “ministra dimisión”, gritó la veintena de funcionarios de justicia concentrados a las puertas del Supremo, sujetando pancartas con proclamas similares, para recibir a la ministra, que ha acudido al CGPJ –situado justo enfrente– para asistir a la entrega anual de premios del Foro Justicia y Discapacidad.
Al bajar del coche, la ministra de Justicia dirigió la mirada al grupo de manifestantes pero entró en la sede del órgano de gobierno de los jueces sin hacer declaraciones.
Los funcionarios de justicia comenzaron una huelga indefinida el 17 de abril que se ha traducido en paros parciales diarios y de jornada completa puntuales. No obstante, la ausencia de negociaciones con el Ministerio que dirige Llop llevó al comité de huelga, integrado por CSIF, STAJ, CCOO y UGT, a anunciar una huelga total a partir del 22 de mayo.
El CSIF informó el jueves a través de un comunicado, la huelga provocó ya la suspensión de medio millón de juicios, a los que se suman más de treinta millones de actuaciones judiciales paralizadas.
El comité de huelga exige una mejora salarial de entre 350 y 430 euros para los 45.000 funcionarios de justicia, lo que supondría una inyección de unos 200 millones de euros.
El secretario de Estado, Antonio ‘Tontxu’ Rodríguez, trasladó a los funcionarios que el Ministerio se sentará a negociar con ellos una vez se resuelva el conflicto con jueces y fiscales, que amenazaron con ir a huelga indefinida este mayo.