Siete incendios forestales en las provincias de Lugo y Ourense se mantienen activos este lunes, mientras que otros cuatro han sido extinguidos, informa la Consellería do Medio Rural.

Permanece activo el fuego de los municipios de Folgoso do Courel y A Pobra de Brollón (Lugo), parroquias de Vilamor y Saa, con 10.000 hectáreas en llamas tras juntarse cuatro focos, aunque la situación de riesgo para núcleos poblados ya está desactivada.

También está activo un incendio en Folgoso do Courel, parroquia de Seceda, con 1.100 hectáreas y la situación de riesgo para la población ya descartada.

Siguen controlados dos fuegos en Quiroga, el primero en la parroquia de Nocedo con 15 hectáreas y el segundo en la de Outeiro, con 250.

Quedaron extinguidos anoche en la provincia de Lugo tres incendios en Cervantes (Cereixedo, 65 hectáreas), Palas de Rei (Ramil, 375) y Antas de Ulla (Santa Mariña do Castro Amarante, 54,1).

En la provincia de Ourense está activo un incendio en Vilariño de Conso, parroquia de Pradoalbar, con 6.500 hectáreas, que afecta al parque natural do Invernadeiro.

Está estabilizado desde las 20:33 horas de ayer el fuego que quema 10.500 hectáreas en Carballeda de Valdeorras, parroquia de Riodolas, con la situación de riesgo para núcleos poblados desactivada y afectación al parque natural da Serra da Enciña da Lastra.

Los equipos de extinción tienen controladas las llamas en Oímbra, parroquia de Rabal, tras quemar 2.100 hectáreas y extinguieron anoche otro fuego en el mismo municipio, parroquia de San Cibrao, que había quemado otras 370.

Son, en total, siete incendios que siguen pendientes de extinción -uno de ellos que eran originalmente cuatro diferentes- y suman 30.465 hectáreas, una cantidad que multiplica por diez lo que ardía al principio del pasado fin de semana del 16 de julio.

En las últimas horas han quedado extinguidos cuatro incendios que suman 864,1 hectáreas y continúa el trabajo para llevar a la misma situación los demás, con coordinación de medios autonómicos y estatales.