Si Argentina, el país del exterior en el que residen más gallegos, fue el primer país elegido por el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, para activar su agenda de viajes institucionales al extranjero de esta legislatura, Brasil es su segundo destino elegido y lo visitará este mismo mes.
En concreto, según fuentes de la Xunta consultadas por Europa Press, el mandatario autonómico tiene agendado este viaje para la tercera semana de septiembre. Así, desde el 20 al 23 de septiembre visitará Río de Janeiro y Sao Paulo.
Durante estos días, su objetivo es mantener reuniones empresariales, contactos con las autoridades locales y también encuentros con la colectividad.
No en vano, Brasil es un país con una relevante presencia de la emigración gallega, donde los negocios de la comunidad son igualmente importantes, especialmente en el ámbito de la hostelería.
El Ejecutivo gallego tampoco pierde de vista las oportunidades que supone el hecho de que se trate de un país lusófono.
Tras consolidar la mayoría absoluta en las pasadas elecciones autonómicas del 18 de febrero, Rueda no quiere dejar de lado la agenda exterior, que pretende asentar en tres pilares: la atención a la colectividad, la relación con Portugal y abrir las puertas o reforzar lazos del empreariado gallego en otros países.
De hecho, el periplo por Argentina de mayo permitió al también líder del PP gallego mantener contacto con los emigrantes, pero tuvo, sobre todo un marcado carácter económico, dado que se desplazó al sur para apoyar los intereses de las pesqueras gallegas en el país.
Va en la línea con el objetivo de contribuir desde la Xunta a la captación de inversiones para Galicia y ayudar e impulsar a las empresas gallegas que se asientan fuera de las fronteras de Galicia y España.
Fuera del ámbito económico, el Gobierno gallego mantiene como prioridad la relación con quienes abandonaron, en su día, Galicia, para emigrar y con sus descendientes.
Finalmente, reforzar la "fructífera" relación con Portugal será otro de los ejes de la política exterior autonómica en este mandato, con el foco en cuestiones como el AVE Oporto-Vigo, asumir la presidencia de la Eurorregión y potenciar una colaboración interfronteriza que la Xunta ve ya "modélica".