La situación es “catastrófica” en los hospitales Naser y Al Amal del sur de la Franja de Gaza, asediados por el ejército israelí desde hace diez días, por lo que peligra la vida de miles de médicos, pacientes y desplazados que ahí se refugian, denunciaron ayer fuentes oficiales palestinas.
“La situación está empeorando en el Complejo Médico Naser y en el Hospital Al Amal en Jan Yunis”, la región más importante del sur del enclave palestino, indicó en un comunicado Ashraf Al Qudra, portavoz del Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás.
“Su situación catastrófica amenaza con la muerte de muchos heridos y enfermos, debido a los ataques y la falta de capacidad médica”, añadió, al asegurar que los dos hospitales se quedaron sin alimentos y que los niveles de combustible –necesario para hacer funcionar las máquinas y tener luz– disminuyeron de manera crítica.
“Hacemos totalmente responsable a la ocupación israelí por las vidas del personal médico, los pacientes y las personas desplazadas” que ahí se encuentran, destacó el Ministerio.
El servicio de emergencia Media Luna Roja Palestina, que opera en Gaza, aseguró que las fuerzas israelíes “todavía están estacionadas en la zona sur oriental del hospital Al Amal, y hay francotiradores en los tejados de las casas que rodean el hospital”. Además, “se escuchan sonidos de explosiones como resultado de los ataques en el área por parte de las fuerzas de ocupación, que siguen prohibiendo a todos los que se encuentran dentro del hospital salir a la calle”, añadió.
Según la Media Luna Roja, los soldados israelíes atacaron desde la mañana de ayer a desplazados y varios de sus trabajadores en el hospital Al Amal, que documentó 13 víctimas, entre ellas siete muertos. De esos muertos, uno era paramédico, y su cadáver aún yace en la puerta del hospital, donde fue atacado, pues el personal médico no puede llegar al él debido a la peligrosidad de la situación, explicó.
Un equipo de ambulancias de la Media Luna Roja se abrió paso el martes por una peligrosa ruta y logró llegar al hospital Naser para suministrar 25 tubos de oxígeno, después de que el suministro de del hospital se agotara.
El Ejército de Israel estima que los mayores líderes de Hamás en Gaza se esconden en Jan Yunis, por lo que recrudeció su ofensiva por aire, tierra y mar en esta zona desde hace varias semanas.
En los últimos días, el ejército ordenó la evacuación de cientos de miles de gazatíes en diversas zonas de Jan Yunis, para que se desplazaran más al sur, donde también hay bombardeos.
Desde el 7 de octubre, Israel contraataca con potencia, lo que dejó casi 27.000 muertos y 66.000 heridos, la mayoría niños y mujeres, así como 8.000 desaparecidos. Además, unos 2 millones de gazatíes, casi la totalidad de la población, ha sido desplazada y sobrevive en una crisis humanitaria sin precedentes, en medio del colapso de los hospitales, el brote de epidemias y al límite de la hambruna, mientras persiste la escasez de agua potable, medicinas y electricidad.