La central térmica de Zaporiyia, bajo control ruso y una de las mayores de Ucrania, se ha visto obligada a suspender el funcionamiento debido a la falta de carbón, que no puede ser suministrado con motivo de las hostilidades en el sur del país, según fuentes ucranianas.
Dmitry Orlov, el alcalde de la ciudad de Energodar, donde se ubica la planta, anunció en declaraciones citadas por el diario "Ukrainska Pravda" el cese temporal del funcionamiento de la térmica.
"Por desgracia es un paso forzoso, la compañía se ha quedado sin carbón y no es posible organizar un suministro regular," declaró, aunque señaló que la medida no afectaría a la población local, puesto que la central nuclear de Zaporiyia sigue en funcionamiento y garantiza el abastecimiento.
La falta de carbón "se debe a la ocupación de nuestra ciudad, las dificultades logísticas debido a las luchas constantes en el sur de Ucrania y las infraestructuras destruidas que incluyen puentes y tramos de ferrocarril," explicó el alcalde.
La central de Zaporiyia es la térmica con mayor capacidad del país, unos 3.600 megavatios, junto con la planta de Vuglehirska, en la provincia oriental de Donetsk, que se encuentra en la línea del frente de los combates entre fuerzas rusas y ucranianas.
La central térmica de Zaporiyia y la vecina central nuclear fueron capturadas por las tropas rusas el pasado 4 de marzo.