Esta semana se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una efeméride que se ha establecido para el día 3 de diciembre. Este día tiene como objetivo promover la conciencia sobre las cuestiones relacionadas con la discapacidad y movilizar el apoyo para la dignidad, los derechos y el bienestar de las personas con discapacidad. La fecha fue establecida por las Naciones Unidas y se celebra a nivel mundial con diversas iniciativas y eventos destinados a sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de la inclusión y la igualdad para las personas con discapacidad.
La discapacidad es una condición que afecta la capacidad de una persona para realizar actividades cotidianas de manera típica. Puede manifestarse de diversas formas y puede deberse a condiciones físicas, mentales, intelectuales o sensoriales. Es importante tener en cuenta que la discapacidad no define la valía de una persona ni su capacidad para contribuir a la sociedad.
La Organización Mundial de la Salud define la discapacidad desde un punto de vista amplio: como el “resultado de la interacción entre afecciones como la demencia, la ceguera o las lesiones medulares, y una serie de factores ambientales y personales”. Este organismo internacional calcula que 1300 millones de personas en el mundo — es decir, 1 de cada 6 personas— sufren una discapacidad importante.
Hay diferentes tipos de discapacidades, y algunas de las categorías comunes incluyen:
Además, una última categoría hace referencia a las discapacidades invisibles: algunas discapacidades no son fácilmente identificables a simple vista, como los trastornos neuropsiquiátricos o las enfermedades crónicas. Estas discapacidades pueden presentar desafíos significativos, aunque no sean evidentes externamente.
En España, según el Instituto Nacional de Estadística, hay un total de 4,38 millones de personas que tienen algún tipo de discapacidad. Esto supone una tasa de 94,9 de cada mil habitantes. De entre ellos, los problemas más frecuentes son los relacionados con la movilidad. Estas cifras proceden de la Encuesta de Discapacidad, Autonomía personal y Situaciones de Dependencia (EDAD), elaborada por el INE en 2020.
De entre todas las comunidades autónomas, la mayor tasa de discapacidad le corresponde a Galicia, con una tasa de 116,5 personas con discapacidad de cada mil habitantes. Es una media bastante superior a la del total del estado, que se sitúa cerca del 95. Nos siguen Canarias (115,0) y Castilla-La Mancha (111,4).
Galicia es la Comunidad Autónoma española donde más personas con discapacidad hay, con una tasa de 116,5 personas por cada mil habitantes.
Es fundamental reconocer los derechos de las personas con discapacidad y trabajar hacia la inclusión en todos los aspectos de la sociedad. La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, adoptada por las Naciones Unidas en 2006, destaca la importancia de garantizar la igualdad de oportunidades, la accesibilidad y la participación plena en la comunidad para las personas con discapacidad.
La sociedad y las instituciones deben esforzarse por eliminar barreras, tanto físicas como sociales, que puedan limitar la participación activa de las personas con discapacidad. La sensibilización, la educación y la promoción de la inclusión son elementos clave para construir una sociedad más equitativa y respetuosa con la diversidad de habilidades y experiencias.
Además, según la OMS, esta condición afecta a otros temas de salud: algunas personas con discapacidad mueren hasta 20 años antes que las personas sin discapacidad; las personas con discapacidad tienen dos veces más riesgo de desarrollar afecciones como la depresión, el asma, la diabetes, el ictus, la obesidad o problemas de salud bucodental; y las desigualdades en materia de salud se derivan de las situaciones injustas a las que se enfrentan las personas con discapacidad, como la estigmatización, la discriminación, la pobreza, la exclusión de la educación y el empleo, y las barreras que encuentran en el propio sistema de salud.