Los viajeros que lleguen a España en vuelos directos procedentes de China y que den positivo en covid en la prueba diagnóstica realizada en el punto de entrada podrán viajar a su destino pero la clave será la "vigilancia activa", es decir el rastreo, y la secuenciación de la muestra para ver si es una nueva variante.
De esta manera, a los pasajeros de China que hayan dado positivo en la prueba diagnóstica de infección activa por covid se les aplicará, al igual que al resto de españoles, los protocolos sanitarios vigentes en coordinación con las comunidades autónomas, que ya no dictan aislamientos ni cuarentenas pero sí recomiendan tomar medidas de seguridad como mascarilla, higiene de manos y distancia de seguridad.
Según la resolución del Ministerio del Interior, publicada hoy en el BOE, se denegará la entrada, por motivos de salud pública, a toda persona nacional de un tercer país que llegue a España en vuelos directos desde China que "no cumpla los requisitos documentales establecidos en la resolución del 30 de diciembre por la Dirección General de Salud Pública".
Esa resolución establece controles sanitarios a esos pasajeros consistentes en un control documental, visual y de temperatura y una prueba diagnóstica de infección activa en el punto de entrada.
En concreto, España exigirá a los pasajeros procedentes de vuelos directos de China una prueba negativa frente a la covid-19 o pauta completa de vacunación, con vacunas reconocidas por la OMS.
Como novedad, la comprobación de que ese pasajero cuenta con la certificación se realizará, en primer lugar, en origen, en el momento del embarque por parte de los operadores de transporte y, posteriormente, en el puesto fronterizo de llegada por parte de los agentes sanitarios.
Este martes, la gran mayoría de los países de la UE que participaron en la reunión del Comité de Seguridad de la Salud apostaron por pedir pruebas covid a todos los viajeros procedentes de China antes incluso de su salida del país en respuesta al auge de contagios.
Además subrayaron la necesidad de implementar el análisis de las aguas residuales en aviones procedentes de China e insistir en las medidas de higiene personal y uso de la mascarilla en los vuelos.
Estas medidas para reforzar la vigilancia en Europa serán previsiblemente avaladas en la reunión a nivel técnico del Dispositivo de Respuesta Política Integrada a las Crisis (IPCR), en sus siglas en inglés, que se celebra este miércoles.