El director general de Tráfico (DGT), Pere Navarro, reconoció que las multas económicas por sanciones de tráfico no son “muy justas” desde un punto de vista social y recordó que no aumentaron desde 2009 para defenderse de las actuaciones de afán recaudatorio.
De hecho, señaló que en la última reforma de la Ley de Tráfico se endurecieron las sanciones por puntos, pero no las multas económicas. En su intervención en el XVII Foro Internacional contra la Violencia Vial, indicó que la decisión de aumentar solo las sanciones por puntos se debe a que la DGT lo considera “más cómodo” por ser “más justo”.
“Afecta a todos por igual”, declaró Navarro, antes de señalar que una multa económica puede suponer “nada” para una persona con una renta alta, mientras que la misma multa para alguien con una renta más baja supone “un mayor perjuicio”. Además, niega ese afán recaudatorio del que se les acusa destacando la medida puesta en marcha, también en 2009, que permite a los usuarios pagar el 50% de la misma si lo hacen en período voluntario. Lo que, a su juicio, demuestra que no existe la necesidad en la DGT de ingresar más dinero.
En este sentido, explicó que esta medida nació porque “había empresas quita multas a las puertas de las jefaturas de tráfico” y los funcionarios tenían “montañas de recursos y alegaciones” en las oficinas. Navarro señaló que la existencia de estas empresas le parecía propio de “país poco serio”, “chungo” y “bananero”.
Gracias a esta iniciativa, explicó el responsable de Trafico en España, “desaparecieron estas empresas”. El objetivo de la DGT, según indicó, es que “la gente no infrinja”, que “no haya ninguna sanción” y conseguir “ingresos cero por sanción”. “Ni la DGT, ni el funcionario ni el policía vamos a porcentaje”, señaló.
Así, rechazó las actitudes que, en esta materia, puedan tener personas públicas en la política y explicó que durante su comparecencia, este miércoles, en el Congreso para tratar los presupuestos de la DGT, un diputado “de la derecha” también le acusó de buscar la recaudación.
Navarro dijo entender esta actitud en una persona que fue vista por un agente infringiendo alguna norma y es sancionado, pero critica que estas palabras salgan de un diputado “porque la política es pedagogía” y, a su juicio, los políticos deben “ayudar un poco a elevar el nivel”. “No puedes dejarte arrastrar por las redes sociales a cuenta de un rédito que no acabo de verlo”, declaró. “Ponemos sanciones y vamos a continuar porque forma parte de la política de seguridad vial y si queremos reducir la siniestralidad, la vigilancia y el control son esenciales”, señaló.
El acto, organizado por STOP Accidentes, fue inaugurado por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien repasó los logros del foro, principalmente en materia de visibilización, atención a las víctimas y judicialización.
El ministro se refirió al mayor conocimiento que se tiene ahora sobre la materia, poniendo como ejemplo que él mismo desterró el término “accidente de tráfico”, porque “la inmensa mayoría de los siniestros viales no lo son”, están “provocados por una conducción agresiva o despistada” o por personas que han “infringido” las normas o que han “consumido” antes de subirse al coche.
Grande-Marlaska indicó que “se puede concluir que los siniestros viales no son consecuencia de la casualidad. Todos son evitables”.
A su juicio, el cambio de actitud es el causante del cambio en la siniestralidad. En España, según apuntó, en 2004 fallecían 4.741 personas, frente a las 1.533 perdonas de 2021.
Aun así, admitió que el número de fallecimientos por esta causa continúa generando “una enorme cantidad de sufrimiento”. “No vamos a conformarnos, vamos a seguir trabajando. Hay margen de mejora y un tránsito seguro y sostenible es un valor por el que merece la pena apostar”, señaló el ministro del Interior.