Con el cambio de nombre de la plaza del General Millán Astray, el Gobierno local dará el pistoletazo de salida a la eliminación del denominado callejero franquista. A partir del 8 de octubre la citada plaza pasará a ser la de As Atochas y ese día se convertirá en la primera de las 22 localizaciones que serán “bautizadas” de nuevo.
El Ayuntamiento comienza así la “aplicación da Memoria Histórica na Coruña, tras anos de demora alimentada ou consentida polas propias institucións”, como señalaba ayer la Marea en un comunicado.
La formación política llevaba en su programa electoral hacer “efectiva dunha vez” la mencionada ley para que “desaparezan para sempre do rueiro municipal nomes que xa hai anos que non deberían estar aí”. Un punto que querían dar forma en los cien primeros días de gobierno, y al final fue el día 103 (contado desde la investidura) cuando el alcalde, Xulio Ferreiro, anunció el cambio de denominación de Millán Astray.
El nombre había sido elegido en un pleno en 2009. En diciembre de aquel año, la corporación decidía suprimir el título de varias calles de la ciudad y al tiempo daba su visto bueno a la nueva onomástica. Sin embargo, ese acuerdo plenario nunca se llevó a la práctica.
Callejero
Antes de ese pleno, se modificó el Viaducto del Generalísimo que ahora se denomina de San Pedro de Mezonzo.
Las nuevas placas que no vieron la luz fueron la avenida de Oza, que hoy sigue siendo avenida de General Sanjurjo. Teniente General Gómez Zamalloa, iba a llamarse cuesta de la Unión. Cabo Santiago Gómez, Ópera; avenida Alférez Provisional, Puerto; avenida de los Caídos, Concordia y avenida Joaquín Planells Riera, Ferrocarril.
En aquel momento, la corporación coruñesa también aprobaba varios conceptos que sustituirían a los personajes relacionados con el franquismo, aunque no especificaba su lugar. Así, proponían Filantropía, Cultura, Educación y Ría do Burgo, para tal fin.
Según la comisión de expertos que en 2009 decidió qué localizaciones debían ser renombradas, a las citadas hay que añadir la plaza y calle del General Mola; General Cánovas Lacruz; Teniente Coronel Teijeiro; Comandante Barja; Almirante Vierna; División Azul; Sargento Provisional; de los Caídos; Juan Canalejo; Arcadio Vilela Garate; Salvador y Merino; Castillo de Olite; Pepín Rivero y la calle Paralela a Joaquín Planells Riera.
De este modo, y según los planes municipales, los vecinos de esta veintena de localizaciones, tendrán que acostumbrarse, más tarde o más temprano, a una nueva denominación.
“A Coruña presume de cidade avanzada e progresista e precisa liberarse dos virus que afectan ao seu rueiro para camiñar con menos lastre e con máis orgullo. Con máis decencia”, concluyen desde la Marea.