Encender una estufa de leña no resulta demasiado difícil si sabes cómo. Tienen un encendido más sencillo de lo que parece y que puedes realizar de forma rápida.
Las estufas de leña serán siempre el sistema de calefacción más tradicional. Llegaron para quedarse creando los ambientes cálidos, agradables y acogedores, siendo esa su mayor virtud. Nada como tener en tu hogar un confort inigualable.
En una superficie adecuada, las estufas de leña son lo justo y necesario para calentar el espacio. Son bastante económica y la leña puedes conseguirla prácticamente gratis. Comprar una estufa de leña es muy fácil y te aportará cosas que otras calefacciones nunca lo harán.
Las estufas de pellets cuentan con una salida de humos al exterior. Las estufas de leña también necesitan esta conexión, para así ser completamente seguras y poder proporcionarte entre un 70 y un 80 por ciento de calor.
Saber cómo encender una chimenea de leña está al alcance de tus manos, por eso, debes anotar lo que necesitas y ponerte manos a la obra.
Para encender la chimenea de leña, sólo necesitas:
Antes de comenzar, asegúrate de que la chimenea de leña se encuentra lo suficientemente alejada de materiales u objetos combustibles, como muebles, madera, cortinas, alfombras o personas.
Una vez hagas la comprobación de seguridad, coloca unas cuantas ramas pequeñas, una pastilla de encendido y un poco de periodo.
Es importante que todos estos materiales no se encuentren "apelotonados" o demasiado juntos, ya que tienen que oxigenar para que la llama tire.
Procede a encender un trozo de papel de periódico y deposítalo junto al resto de materiales, poco a poco.
Una vez tengas el fuego un poco avivado, es el momento de dejar que oxigene bien y evitar que se apague. Para ello, solo debes ir con cuidado con los troncos grandes.
Ve añadiendo los troncos más grandes a la estufa de leña y ve de uno en uno, así evitarás que se apague.
Por otro lado, otro de los métodos importantes y más usados a la hora de encender una estufa de leña es usando las piñas.
Si colocas pequeños trozos de pastillas de encendido en el interior de la piña, podrás encenderla poco a poco y colocarla. de esta forma, siempre estará ardiendo y ayudará a la combustión con el resto de materiales.
Las estufas de leña suelen ser metálicas, de hierro fundido o de acero. Estos materiales permiten que el calor en la habitación se mantenga más fácilmente.
Las chimeneas de leña están formada por una caja metálica que cuenta con ventilación. También puede estar hecha con materiales refractarios, que permiten resistir a altas temperaturas sin necesidad de deshacerse, deformarse o desgastarse.
Las chimeneas tienen un tubo de evacuación de gases que se encuentra oculto en una pared empotrada. Esto permite distribuir el calor de forma más indirecta y mucho más rápido.