El Reino Unido progresa en sus negociaciones con Estados Unidos e intentará en 2021 unirse al Tratado Integral y Progresista de Asociación TransPacífico (CPTPP, en sus siglas en inglés) mientras trabaja para lograr un acuerdo bilateral con la Unión Europea (UE), dijo ayer la ministra británica de Comercio Internacional, Liz Truss.
Truss expuso las prioridades del Gobierno del primer ministro, Boris Johnson, al participar en una conferencia virtual de dos días sobre comercio internacional organizada por la patronal Confederación de la Industria Británica (CBI).
La ministra aseguró que, “por supuesto” el Reino Unido quiere alcanzar “un buen acuerdo” con los Veintisiete antes del fin del periodo de transición el 31 de diciembre, pero desea “ir más allá”.
“Estamos emergiendo como una nación independiente después de 40 años, y queremos convertirnos en un núcleo de comercio e inversión”, sobre todo en áreas punteras como “el comercio digital, tecnología verde y medioambiente”, afirmó la ministra británica.
Ante una audiencia de empresarios, Truss señaló que el acuerdo comercial firmado con Japón, “muy avanzado en asuntos como datos digitales”, “da una idea de la política que seguirá el Gobierno” en sus pactos comerciales.
Japón y otros países como Australia y Nueva Zelanda, con los que también negocia, serán clave para apoyar la pertenencia británica al CPTPP, que daría acceso a un mercado en Asia-Pacífico que, según la ministra, “abrirá muchas puertas” a los exportadores nacionales.
Después del tratado con la UE, el acuerdo más importante para el Reino Unido es el que negocia con EEUU y la meta es “avanzar todo lo que se pueda antes de las elecciones presidenciales” del 3 de noviembre, señaló Truss.
Dijo que otro objetivo de Londres en la era posterior al Brexit, que se ejecutó formalmente el pasado 31 de enero, es “contribuir a cambiar las normas” de la Organización mundial del Comercio (OMC), que “no se tocan desde 1995”.
Acercamiento a la UE
A través de su portavoz, Johnson afirmó ayer que mantiene el 15 de octubre, cuando se celebra el Consejo Europeo, como fecha límite para acordar los principios de un tratado con los Veintisiete.
Aunque persisten diferencias en áreas como la pesca y las subvenciones estatales a empresas, en los últimos días el líder “tory” ha conversado con varios líderes europeos y hay indicios de un cierto acercamiento.
Durante la conferencia, el subdirector general de la CBI, Josh Hardie, dijo sentirse “cautelosamente optimista” sobre un posible pacto con Bruselas y observó que “el ambiente ha mejorado”.
Hardie subrayó la importancia para el sector empresarial británico de que se consiga ese tratado, aunque sea básico y sirva para “seguir construyendo”, y apuntó que, según sus encuestas, un 77% de los negocios del Reino Unido desea ese pacto.
“La diferencia entre salir con un acuerdo, aunque no sea tan amplio como pudiera haber sido, o sin él es absolutamente enorme”, insistió Hardie, que remarcó que “ahora cada día cuenta”. l