Emoción y nervios. Esta mezcla de sentimientos no faltó ayer en el acto de bienvenida que tuvo lugar en el Chuac para los 92 nuevos residentes que acogerá, como mínimo, los cinco próximos años.
Tras elegir plaza en Madrid hace unas semanas, las nuevas caras aterrizaron con un manojo de sensaciones en el salón de actos del hospital. Con una puntualidad extrema, hicieron gala de adquirir las buenas costumbres médicas antes de tiempo y, sin dejar de lado el reloj, durante esta semana tendrán charlas, mientras que el sábado y domingo comenzarán fuerte, con guardias.
Los nuevos residentes tienen procedencias diferentes, desde El Puerto de Santa María a la República Dominicana, pero con un objetivo común: aprender y exprimir los próximos años con muchas ganas y energías positivas. “Hice las prácticas de Sexto de Medicina aquí y me quedé”, comentó una de las nuevas residentes de Endocrinología, Marta. Al igual que Alba, procedente de Sevilla, la cual hizo un intercambio con el hospital herculino y se “enamoró de Galicia”.
Para la mayoría de los residentes era la primera opción, tanto por la calidad asistencial como por el renovado interés en la actividad investigadora. Y es que el Chuac es un centro de referencia a nivel nacional e internacional, el cual suele recomendar todo el mundo que convive y se familiariza en él. Muchos comentaron que “el buen rollo” existente y conocido entre el personal del centro fue otro de los condicionantes para tomar la última decisión. Una elección que no fue fácil, pero que en el día de ayer todos pensaban que había merecido la pena por alcanzar y ejercer la profesión de sus sueños y por la que llevan tanto tiempo luchando. “Estoy a la expectativa”, comentó la lucense Carmen, mientras que Isabel, residente de Oftalmología, afrontaba el día “emocionada”. También se pudieron escuchar reacciones como “tranquila, como en casa” o “con mucha ilusión”.
A la pregunta de si habían dudado mucho a la hora de escoger especialidad, muchos aseguraron que habían dudado hasta el último momento, mientras que otros tuvieron claro desde el principio por qué decantarse. “Digestivo, Cardiología o Medicina Preventiva” sonaron en la sala para completar un total de 55 plazas de medicina hospitalaria, 20 de medicina familia, 15 plazas de enfermería, una de farmacia y otra de psicología, que se distribuirán entre los hospitales Universitario de A Coruña, Teresa Herrera, Marítimo de Oza, Abente y Lago y los centros de salud.
La bienvenida corrió a cargo de especialistas del Chuac, que destacaron la docencia impartida, la asistencia con un componente más humano y la innovación.