Todavía no está en funcionamiento, pero se espera que pronto se ponga en marcha un nuevo aparato de vigilancia del tráfico. Se trata de un sensor instalado en el cruce de la avenida de Arteixo con la ronda de Outeiro y que tiene como objetivo evitar que los conductores se salten el semáforo en rojo. El pasado miércoles los técnicos lo colocaban en el mismo poste donde se ubica la cámara de vigilancia de la Policía Local.
La razón de que se haya instalado allí, precisamente, es que este cruce es uno de los más delicados de la ciudad y tiene que soportar una gran cantidad de circulación en todos los sentidos. Son habituales las quejas de los vecinos por el escaso tiempo que tienen para cruzar la calle antes del cambio de disco. De este nudo es especialmente sensible el semáforo que regula el tráfico que viene desde la avenida de Arteixo y gira a la izquierda para bajar por la ronda de Outeiro, porque solo puede estar abierto unos pocos segundos, que son suficientes para dejar que pasen apenas tres coches.
Sin embargo, para evitar tener que esperar a que el disco se ponga de nuevo en verde, muchos conductores pisan el acelerador cuando el semáforo ya está en rojo, lo que ha dado lugar a colisiones y varios alcances cuando tienen que parar bruscamente en la siguiente señal. Es por eso que el nuevo sensor apunta a este semáforo.
Vía prioritaria > El aparato no es un radar, sino una cámara diseñada para captar de forma automática la matrícula de los conductores cuando se saltan el semáforo en rojo; de ahí el nombre, “Sicam Red Light”. Funciona de una manera muy parecida a las cámaras que ya están instaladas en el recorrido de la nueva vía prioritaria vigilada, que graban las matrículas de los vehículos que estacionan en el carril naranja impidiendo el paso al bus.
Estas últimas sí se controlan desde la sala de semáforos, donde comprueban que el programa de ordenador ha identificado a un infractor y no a una ambulancia u otro vehículo con permiso para detenerse en la calzada. Sin embargo, el Ayuntamiento no ha revelado si los agentes municipales serán los encargados de comprobar las denuncias que se generen a través de la nueva cámara cuando entre en funcionamiento.