Uno de los capítulos de licencias anuladas por la justicia en Arteixo llega a su fin. Después de ocho años, el vertedero de Monticaño comienza a andar hacia la regeneración y ya se pueden ver por el basurero a las máquinas trabajando.
Son los primeros pasos para el sellado del mismo. Después de que en 2007 se anulase la licencia y que los tribunales ordenasen que se revirtiesen los terrenos, en 2010, el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia daba el visto bueno al sellado, atendiendo a un informe técnico y medioambiental encargado por el Ayuntamiento.
Aclarada la actuación que había que ejecutar en este paraje, quedaba un siguiente paso: quién pagaría la actuación, puesto que las sentencias aludían a Coacon (concesionaria) y al Ayuntamiento, quien otorgó la licencia en 2003.
Al final, las partes llegaron a un acuerdo y, a pesar de las amenazas de reclamaciones patrimoniales millonarias, empresa y Administración acordaron dividir los gastos. La primera fase (enterrar los residuos) corre a cargo de Cespa –antigua Coacon–, y supone un coste de 1,1 millones de euros. La segunda, transformar el espacio en una gran área verde con múltiples área, tiene un presupuesto de 924.376 euros.
De este modo, Monticaño se convertirá en un espacio similar al parque de Bens en A Coruña, en donde también se regeneró un vertedero.
En el caso de la actuación coruñesa, llevó casi cinco años poder inaugurarlo. Los tiempos pueden ser similares en el caso de Arteixo, aunque desde el gobierno local esperan reducirlos y apuntan a unos dos años para empezar a ver cómo el parque toma forma.
Los operarios pudieron comenzar con las labores de recuperación del entorno después de que el Ayuntamiento lograse la aprobación para el plan especial de la zona. Además, confía el gobierno local en que la empresa les ceda el espacio, una vez que termine la actuación completa.
Proyecto
Con la rehabilitación del basurero, los vecinos y visitantes disfrutarán de 182.000 metros cuadrados de superficie, en la que se engola la futura actuación y el actual parque.
Crearán cuatro miradores que ofrecerán una vista panorámica de Pastoriza, A Coruña, Monticaño y punta Langosteira y la Cosa da Morte. Una instancias conectadas a través del camino principal, por el que también se llegará a las dos zonas en donde se creará una zona acuática.
Habrá dos aparcamientos, uno en la entrada de Pastoriza y otro por Suevos, además de una explanada para celebraciones populares con pérgola.
Los redactores del proyecto contemplan también una zona arbórea en la confluencia de los caminos. Añaden espacios de ocio, como juegos infantiles o merenderos. La partida más elevada se la lleva el movimiento de tierras (157.000 euros) y la cimentación de muros (152.000)
A Cespa le corresponde un tanque de lixiviados que tendrá que controlar la empresa.