El Gobierno local descarta poner en marcha el proyecto Micasita debido al ambiente de crispación que se produjo cuando hace unos meses anunciaron que su ubicación estaría en Eirís y esperarán a que haya un “clima adecuado”.
El anuncio fue realizado ayer por la concejala de Justicia Social y Cuidados, Silvia Cameán, quien indicó que “neste momento non toca”. Lo que no aclaró la representante del equipo de gobierno es si se retomará esta iniciativa antes de que acabe el actual mandato y no indicó ninguna fecha posible.
El pasado mes de abril el Gobierno local comunicó que cedía una parcela en Eirís al Hogar Sor Eusebia para construir un inmueble que contaría con una veintena de módulos para acoger a personas que viven habitualmente en la calle.
La decisión provocó un amplio rechazo en el barrio y se produjeron varias protestas. Las intervenciones de los miembros del Gobierno local no consiguieron calmar los ánimos y un mes después la Marea optó por dar marcha atrás e indicó que esta no sería la ubicación del proyecto. “Despois do conflicto veciñal necesítase un tempo”, explicó.
El clima de rechazo vivido en Eirís la pasada primavera fue continuado con una serie de conversaciones entre el Gobierno local y el Hogar Sor Eusebia para intentar encontrar una solución que convenciese a todas las partes, algo que no llegó.
Nuevo contexto
Ahora el Ayuntamiento apuesta por dejar que se enfríe el ambiente y por esperar a otro momento en el que este proyecto sea recibido de otra manera. “Ten que darse un novo contexto”, aseguró ayer Cameán, quien añadió que Micasita se hará “cando haxa un clima adecuado” para ello.
La decisión del Gobierno local cogió por sorpresa a los miembros del Hogar Sor Eusebia, a quienes no se les comunicó que el proyecto queda aparcado sin una fecha concreta.
El director de la institución, Diego Utrera, explica que hace alrededor de dos meses que mantuvieron los últimos contactos con el Ayuntamiento. En aquel momento les indicaron que “haría falta tiempo” para ver los pasos que seguía el proyecto, pero en ningún instante les anunciaron que se descartaba y sin una fecha para retomarlo.
Utrera señala que le “sorprende” haberse enterado por otros canales y que esta actuación le recuerda a “otros tiempos”. Mientras, señaló que el equipo que dirige el Hogar Sor Eusebia se reunirá para analizar la situación y ver si se toma alguna decisión.
El Gobierno local ofreció otras dos parcelas al Hogar Sor Eusebia además del terreno ubicado en Eirís, que era la opción que permitía que el proyecto viese la luz de manera más rápida. La institución prefería las otras posibilidades, que estaban en San Pedro de Visma y en el entorno de las instalaciones del Hogar.
La primera de ellas requería cambios como negociar con algunos propietarios de terrenos y construir accesos, lo que implicaría una inversión del Gobierno local. Mientras, la cercana al Hogar Sor Eusebia Este está diseñada para usos rústicos, por lo que debería ser sometida a un cambio dotacional en el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM), un proceso largo.
Sin techo
El centro Micasita estaba destinado a acoger a personas sin techo de la ciudad, una situación a la que también hizo referencia Silvia Cameán. La concejala indicó que desde la apertura del Centro Abeiro contabilizan un menor número de personas durmiendo en la calle.
Esta instalación ubicada en Orillamar y abierta desde el pasado verano está destinada a acoger a sin techo por las noches y cuenta con una capacidad para 13 personas.
De esta manera, señaló que los servicios municipales tienen el registro de que actualmente hay alrededor de una quincena de personas sin techo en la ciudad, aunque es una cifra que varía porque a veces cambian de lugar.
“O noso obxectivo segue inalterable: temos que conseguir que nesta cidade non haxa persoas que durman sen un teito”, indicó la concejala, quien rechazó que el número de personas en esta situación llegue a la treintena. l
Continúa la búsqueda de soluciones de realojo para los habitantes del poblado de A Pasaxe
El concejal de Regeneración Urbana y Vivienda, Xiao Varela, explicó ayer que el Gobierno local continúa trabajando en la búsqueda de soluciones para el realojo de los habitantes del asentamiento chabolista de A Pasaxe.
Aunque once familias ya abandonaron el poblado y viven en diferentes lugares, Varela indicó que otras todavía permanecen en el espacio al lado de la ría.
Para estas familias, algo más de una veintena, el edil señaló que se siguen unos criterios determinados. Por una parte está que tengan voluntad de abandonar este espacio, en el que algunas llevan muchos años. Mientras, que cada unidad familiar requiere de una solución específica.
Esto se debe a que algunos casos se centran en “xente maior que vive soa”, mientras que otros son de “parellas con moitos menores”. Así, para cada una se busca el mejore escenario posible.
El concejal indicó que hay otro aspecto que juega un papel importante en este aspecto y es el “grado de arraigo” con otras familias tanto en la ciudad como fuera de los límites del término municipal. l