El abogado argentino Héctor Walter Navarro, especializado en el análisis y persecución de diferentes sectas, remitió dos escritos al Juzgado de Instrucción Número 1 de Santiago para pedirle que investigue la posible relación entre los ritos gnósticos, que considera una “secta destructiva”, y el fallecimiento de un bebé en un hotel de la ciudad.
En el primero de estos escritos, presentados en Santiago ante la jueza Ana López Suevos, Héctor Walter Navarro asegura que la muerte de la niña, ocurrida hace una semana, “no es un hecho de locura individual”, sino que se produjo dentro de un “rito sectario” animado por las creencias gnósticas.
Por ello, además de la madre, que supuestamente pudo acabar por asfixia con la vida de su hija, de seis meses, el letrado considera que son culpables de la muerte el padre de la menor y “todos los dirigentes” gnósticos.
En particular, el abogado considera que la muerte de la niña podría enmarcarse en una vulneración del mandato de la “alquimia sexual”, una práctica según la cual los gnósticos consideran que, durante las relaciones sexuales, no debe llegarse nunca a la eyaculación.
De hecho, apunta, la circunstancia de que un matrimonio gnóstico tenga una hija levanta sospechas acerca de que esta práctica pueda haberse vulnerado y el hombre pueda haberse convertido en un “mago negro” a través de ella.
Por otra parte, Héctor Walter Navarro ha presentado también un escrito en el que denuncia un posible caso de intrusismo por parte de los organizadores del congreso gnóstico que se celebró en Santiago y en el que participaron los padres de la niña.
En particular, hace referencia al nombre del XXII Congreso de Antropología Gnóstica, que acogió Compostela y que, denuncia, no tiene relación real “con la antropología”.
La niña, de seis meses, falleció el lunes en un hotel de la capital gallega en el que se encontraban hospedados sus padres para participar en un congreso, cuando se encontraba sola con su madre en la habitación.