El Ayuntamiento pedirá a la Autoridad Portuaria que habilite una zona de baño delimitada en la ensenada de O Parrote, siempre y cuando esto no afecte al marisqueo y fijando como prioridad la seguridad de los bañistas.
La iniciativa se acordó ayer en la comisión del borde litoral, presidida por el concejal de Marea Atlántica, Xiao Varela, a la que asistieron el edil responsable de Urbanismo, Juan Díaz Villoslada, y los concejales del PP, BNG y Ciudadanos Roberto Rodríguez, Avia Veira y Mónica Martínez, respectivamente.
En la cita se hizo entrega de las 1.115 firmas que se recogieron, a iniciativa de dos vecinas que llevan años utilizando las aguas de O Parrote para darse baños, para solicitar que se levante la prohibición actual de nadar en la zona.
“Con esta medida poderemos regularizar un uso que sempre foi habitual nesta zona, onde estaba a histórica praia do Parrote. Agardo que se desenvolva canto antes”, destacó Xiao Varela tras la comisión municipal.
La comisión del borde litoral recibió ayer las 1.115 firmas a favor de que se retire la prohibición de nado
Con todo, desde el Gobierno local, Villoslada recordó que la decisión depende de la Autoridad Portuaria, que “é quen ten a última palabra” ya que la zona de baño se encuentra en el espacio portuario. “É necesario que o Porto dea o visto e prace despois de analizar os informes da Comandancia da Mariña”, destacó el edil.
Asimismo, el Ayuntamiento supedita el proyecto al cumplimiento de la normativa, por lo que, de conseguir la aprobación del Puerto, será necesario balizar la zona, instalar puestos de socorrismo con el resto de playas de la ciudad y analizar periódicamente las aguas para garantizar que son aptas para el baño, tal y como ya indicó la alcaldesa, Inés Rey, el pasado mes de julio cuando se colocaron las señales que prohiben el baño en O Parrote.
Estudios
Desde Ciudadanos, su concejala, Mónica Martínez, se mostró a favor de crear la zona acotada al baño pero insistió en la necesidad de que las aguas sean aptas para tal fin. “En las dársenas marítio-portuarias no suele ser buena la salubridad del agua, porque son espacios protegidos con diques para evitar oleajes y conseguir óptimas condiciones de atraque de buques y, en este caso, trasatlánticos a escasos metros”, destacó Martínez, que indicó que dichos aceites y demás agentes contaminantes no se diluyen en los océanos como lo harían en espacios abiertos al mar.
Ciudadanos se puso en contacto con el Centro Oceanográfico de A Coruña, donde se monitorizan diariamente diversos parámetros físico-químicos en el agua del puerto –salinidad, temperatura y productividad de las aguas–, pero no del pH, por lo que no se conoce de primera mano la acidez o alcalinidad de la zona.
“Nos cuentan que sí se sabe que no hay gran contaminación biológica, pero evidentemente hay presencia de metales pesados procedentes de las propias embarcaciones y los residuos petrolíferos generados por la propia actividad portuaria que llevan a pensar en la presencia de aceites minerales que disminuyen la oxigenación del agua”, apuntan.