La calle de San Andrés ya es peatonal durante todo el fin de semana. Tras el anuncio el viernes de la alcaldesa, Inés Rey, el corte de tráfico rodado durante los domingos se hizo realidad ayer por primera vez. Una decisión que levanta pasiones, pero no está lejos de crear controversia entre comerciantes y hosteleros de la zona. Estos últimos fueron los que, en un comunicado, solicitaron al Gobierno local que el cierre de la calle no solo se quedase en un hecho puntual de los sábados por la tarde, sino que se ampliase también al domingo.
El Ayuntamiento escuchó sus reclamaciones y hace tres días reflejó su decisión. “Es una medida que ayuda a la hostelería, que al fin y al cabo es la beneficiada. Muchos comercios deciden no abrir porque no les compensa y nos gustaría que nos lo hubiesen consultado previamente”, sostiene el presidente de la Zona Comercial Obelisco, Javier Mosquera.
Opiniones
Así, negocios como el Macondo defienden la decisión, pero no todos los comerciantes lo ven de la misma forma. “La peatonalización no es suficiente para levantar la calle de San Andrés”, comenta tajante Mercedes, de la lencería Eva, en el número 58 de la calle.
La propietaria de este negocio explica que, antes de cortar el tráfico y pretender que el comercio se vea beneficiado, “hay que realizar una reforma completa, pasando por humanizar la zona y dotarla de bancos y elementos verdes”, añade. Y es que, bajo su punto de vista, “la gente pasea los sábados pero no se paran a mirar escaparates”. Aún así, considera positivo que haya tránsito de personas por la céntrica vía, “aunque sea una calle cuyo asfalto se encuentra en un estado muy agresivo”. Por ello solicita que la condición de peatonalización sea “más estable” con el paso del tiempo. “Desde el punto de vista institucional es una gran noticia, desde a pie de calle, no tanto”, concluye Mercedes.