Los trabajadores del mar llevan años enfrentándose a diversos peligros, pero desde que dio comienzo la crisis derivada del Covid-19 se tienen que enfrentar a una nueva amenaza para su salud, además de para todos aquellos con quienes se relacionan. Es por este motivo que desde la gerencia del área sanitaria de A Coruña y Cee se pone en marcha un plan de protección para este sector.

Desde la propia gerencia ponen en valor que el puerto coruñés registra el mayor porcentaje de descargas de pescado fresco de la comunidad. Además, las condiciones de trabajo en alta mar hacen que las medidas de protección para evitar contagios sean difíciles de mantener.

Los espacios cerrados comunes cuentan con muchas limitaciones en los buques y, además, se comparten camarotes. Las mascarillas se mojan y es complicado que los marineros las puedan recolocar bien con los guantes de trabajo puestos.

Por estos motivos, el objetivo del plan es la reducción de los posibles riesgos de contagio, tanto para el personal de los barcos, como para los pacientes que acuden a los reconocimientos. Para esto se realizan test de antígenos antes de embarcar rumbo a las zonas donde desarrollan su labor diario y a la vuelta de las mismas.

Para poner en marcha este plan, el área sanitaria entabla una colaboración con el servicio de sanidad marítima del Instituto Social da Mariña.

Cabe recordar que hace tan solo un par de semanas, un buque tanque extranjero tuvo que atracar en el Puerto Exterior coruñés para desembarcar a tres posibles positivos y hacer test al resto de tripulación.