Cualquier persona que proceda del área de Ferrol sabe que Cedeira, 6.600 habitantes según su último padrón, llega a triplicar su población durante el período veraniego. Sin embargo, está en las Rías Altas, lo que le endosa la acertada etiqueta de turismo más tranquilo y esencialmente familiar.

Puede que exponer sus abundantes tesoros naturales a medio mundo la dispare a objeto de deseo y el rodaje de "Rapa" está llamado a ser el gran responsable.

Es la nueva producción de Movistar+ y Portocabo, aliadas para unas grabaciones iniciadas al finalizar la temporada estival en la ciudad ferrolana, a la que volverán en su desenlace, previsto para antes de Navidad.

A la villa cedeiresa hay que llegar, una carretera con curvas muere allí tras partir desde la cabecera comarcal. Y los responsables de "Hierro", de la que sigue la estela en buena parte de sus detalles distintivos, se empaparon de sus singularidades y tradiciones para que la serie beba de su entorno.

Alfonso Blanco, 'Fosco', de la productora gallega, guía por el casco viejo y la zona más nueva de Cedeira. Hay un colegio reconvertido en centro de salud en el que algunos vecinos ya han visto por las ventanas cómo se grababa una pelea, pero el argumento y las escenas se guardan con mimo, poco se sabe.

Y también están las tiendas históricas, con sus coquetos escaparates y su atención del día a día al cliente que es más que un vecino.

La antigua Casa del Pueblo del PSOE hará las veces de corresponsalía de un periódico, la que fue casa consistorial y ahora es biblioteca municipal vuelve a ser sede del Ayuntamiento con un cartel de Concello de Cedeira.

Entre sus callejuelas, el relato de una "Rapa" que tiene en Javier Cámara y Mónica López a sus protagonistas, pero cuyo elenco es muestra abrumadora de la rica escena gallega actual. Por rendir homenaje al título de la obra, la Rapa das Bestas ha sido uno de los hitos del rodaje.

En plena sierra de A Capelada, alejados de cualquier vivienda, el curro recibe a los "besteiros" y a los caballos recogidos días atrás en los montes. Como si fuese el día grande de esta fiesta, que habitualmente se lleva a cabo en junio.

Jorge Vellón, uno de los que mantiene viva esta práctica, recuerda que consiste en "cortar las crines y el rabo para que se libren de posibles enfermedades, para que estén más libres en verano por calor, moscas o zarzas".

"Es un hobby o lo llevas dentro", apunta, y esta vez han logrado congregar a unas 130 reses "aunque no es época". Medio natural en su máxima expresión de lo salvaje, un espectáculo al que asisten Cámara y López con pasión a la enésima potencia.

No es fácil traer a los animales, "es demasiada extensión, es imposible traerlas todas", pero un nutrido grupo desemboca en un descampado al que varios autobuses van subiendo a cuatro centenares de figurantes. Es uno de los días de más revuelo.

La aportación económica a ese personal extra o los gastos por alojamiento o comidas alimentan estos días a Cedeira.

Serán seis episodios de puro suspense que tienen su punto de partida en un crimen y en la búsqueda del asesino de Amparo Seoane, la alcaldesa. Tomás, al que encarna Cámara y que es un profesor, se cruzará en el camino de Maite, agente de la Guardia Civil a la que da vida López.

Su director, Jorge Coira, asegura a Efe que se da continuidad a "Hierro" con unos emplazamientos que ni siquiera son "demasiado conocidos en Galicia".

"Para la ambientación no hubo que hacer esfuerzos de documentación; teníamos identificados los elementos que queríamos llevar a la historia", asegura. Ya conocía parcialmente la rapa y le entusiasmó "hablar con la gente, conocer las raíces".

"Es algo que disfruto mucho, entrar en otros mundos, una vida muy diferente a la tuya", apunta.

Para este gallego, cuando atracó el equipo fue inevitable pensar que "no saben la que se les viene encima, va a venir el rock and roll".

No en vano, considera que Cedeira "es un lugar con mucha vida en verano, pero en invierno se convierte en muy tranquilo; se acabó el verano y vinimos, somos una invasión".

Otro Coira, Pepe, guionista en "Rapa", remarca que con "Hierro" subió la "actividad económica durante el año en un 20 %" en la isla canaria, un "grado de optimismo" que en Ferrolterra no dudan de que llegará.