Pocas estampas definen mejor la idiosincrasia gallega que la de la abuela sabia y mañosa que, además de dar los mejores consejos, elabora con sus manos una pieza artesanal que legar a sus hijos o nietos. Una imagen, no obstante, tan global como la propia artesanía, y que ha influenciado a Lucía y Sofía Cabrera, coruñesas de adopción, para abrir en el número 15 de la avenida de Os Mallos Viena’s Studio: un estudio de moda y arte en el que han volcado sus años de aprendizaje y trabajo para ofrecer a la vecindad del barrio una opción de comercio cercano, manual y asequible.
La abuela que origina esta historia es la mujer argentina que da nombre a la tienda: Viena María Falcone. Una persona muy “carismática” que ejercía como una suerte de ‘abuela del barrio’, siempre dispuesta a ayudar a quien lo precisase, y de la que las hermanas ya heredaron objetos como blusas o teteras artesanales que realizó con sus manos. Sin embargo, ellas mismas aseguran que para la idea de tener un proyecto propio y poder asentarse han contado con el apoyo de otros miembros de la familia.
De hecho, proceden de una larga estirpe migrante con raíces en varios países de Europa. Además, por sus trayectorias profesionales y estudiantiles, han visitado a su vez diversos lugares de España, pero es en Galicia, a donde se mudaron en su niñez desde Argentina, donde dicen sentirse en su hogar. Y quizá por eso hayan decidido establecerse en Os Mallos, un barrio donde “todo el mundo te conoce”, para aunar en la urbe herculina tanto el homenaje a sus raíces como su amor por Galicia.
Viena’s Studio tiene dos partes principales diferenciadas, una por hermana: moda y arte. Lucía ofrece así servicios relacionados con el textil, en los que prima el bordado manual, atenta a los detalles y a las particularidades de cada cliente. “Me gustan los acabados bonitos, que reflejen una calidad. Quiero que la prenda dure y sea sostenible: que te pueda durar más que lo que compras en cualquier otro sitio”, explica.
Sus trabajos, de hecho, llegaron a la anterior gala de los premios Mestre Mateo, pues tanto ella, que acudió como invitada, como la actriz Diana Nogueira lucieron vestidos que fueron confeccionados por esta modista, formada en el Instituto Francés de la Moda de París.
La meta de las propietarias es que también funcione como un agente dinamizador de la vida cultural
Sofía, por su parte, que estudió Bellas Artes en Pontevedra e hizo un máster en dirección artística y publicidad, lleva lo relacionado con el ámbito artístico –vende lienzos, llaveros o cualquier clase de objetos con sus dibujos–, pero también ofrece asesoramiento en comunicación o publicidad a aquellos artistas o clientes que puedan requerirlo. En su caso, destaca como influencias los movimientos del expresionismo y el impresionismo, y busca con sus pinturas retratar escenas o paisajes de la vida cotidiana.
No obstante, ambas definen a Viena’s Studio como “un espacio atemporal, dedicado al diseño, al arte y la cultura” de una forma transversal, sin tener por qué centrarse en un solo ámbito. Así, expresan que su meta es que la tienda también pueda servir como lugar en el que llevar a cabo charlas, talleres o presentaciones de libros; que sirva, en definitiva, como un agente dinamizador de la vida cultural del barrio y, por extensión, de la ciudad. “Podríamos estar hablando mil horas de gente que hace cosas muy importantes y muy chulas y que a lo mejor no tienen un lugar donde poder hablar de su trabajo: nosotras estamos abiertas a la gente que aporte a la cultura”, explica Sofía. “El arte, cuando se junta, produce frutos”, manifiesta.
Esta manera renacentista de concebir su trabajo entronca con sus raíces y con el legado que quieren crear. “Al final, el arte es lo que nos queda, ¿no?”, se cuestiona. “Yo no creo que tenga que haber una división entre lo que es alta o baja cultura: todo el mundo merece tener en su casa algo bonito hecho a mano con buenos materiales y con un poquito de amor que esté contigo toda tu vida”, dice. Una filosofía heredada de su abuela, y una declaración de intenciones: la artesanía, como su recuerdo, perdura.