Desde hoy ya se puede visitar un espacio dedicado a la actriz María Casares en la casa museo de su padre, Casares Quiroga. En ella figura un cuaderno escolar de María y un pasaporte de sus padres, donados por el Ateneo Republicano de Galicia al Ayuntamiento. El espacio dedicado a la actriz se encuentra en el tercer piso, en el cuarto que ocupó cuando era solo una niña, antes de marchar a Madrid y luego al exilio, tras el estallido de la Guerra Civil.
En este cuarto figuran imágenes, documentación y objetos originales de la intérprete. Esta musealización forma parte do trabajo de María Lopo como comisaria de actividades del Año María Casares, iniciado con la exposición “María Casares, actriz océano. Itinerario vital dunha exiliada” realizada en el Kiosko Alfonso. Muchos de estos objetos pasan ahora al tercer piso de la casa museo, y forman parte ya del patrimonio cultural del Ayuntamiento.
“Estes dous elementos en subasta serían bastante agradecidos económicamente, para que unha entidade como Ateneo poidera facer un remanente, pero aquí están e estou moi contenta”, señaló la directora de la casa museo, Beatriz Doldán. que considera muy relevante esta donación, que refleja la memoria del exilio: “Hai moitas razóns para valorar isto como unha adquisición importante”.
Por su parte, el presidente del Ateneo Republicano, Juan Luis Pérez Alvajar, explicó que ambos artículos acabaron en manos de la entidad hace más de quince años. La entrega fue la sobrina de María Casares, Esther Casares. “He decidido que no tenía ningún sentido que perteneciera al Ateneo. Tiene mucho más relieve aquí, a disposición de la ciudadanía”, explicó Pérez.
Alvar considera que los 4.000 euros que podrían haber obtenido en una subasta no es nada comprable al orgullo de tenerlo a disposición de todo el mundo, en A Coruña. Por su parte, el concejal de Memoria Histórica, Jesús Celemín, agradeció la donación que calificó de “entrañable para todos los coruñeses” y aseguró que “está en el mejor sitio que podía estar, en la casa natal de María Casares, en la casa de sus padres”.
El cuaderno escolar de Casares tiene 24 páginas, y el pasaporte del matrimonio Casares, de 32 páginas, fue expedido el 18 de abril de 1922 en A Coruña. Celemín valoró el “trabajo callado” que se ha realizado desde Memoria Histórica para hacerse con ambos objetos, que ahora contemplarán el paso del tiempo desde la vitrina de un cuarto donde jugó María Casares.