Casi siete meses después de que el pasado 14 de febrero dieran inicio las obras en la calle de Cortaduría, los vecinos de la Ciudad Vieja ya saben el aspecto que ésta tendrá e incluso pudieron pasear sobre ella. A pesar de que todavía no estaba abierta al público, numerosos viandantes aprovecharon para volver a pisar los históricos adoquines.
Y es que precisamente el respeto a la mayor parte de la piedra original era una de las peticiones que la asociación vecinal de la zona había hecho al Ayuntamiento. Tras comprobar cómo de fiel es la actual calle de Cortaduría, el presidente Leonardo Méndez mostró su satisfacción. “Han respetado bastante de las piedras históricas”, afirma.
A falta de unos pequeños retoques que los operarios se encargaron de realizar en las últimas jornadas, como es el caso del cableado, la calle de Cortaduría recupera su esplendor.
La superficie sobre la que el Ayuntamiento realizó la actuación es de 464 metros cuadrados y el motivo de la misma es el más estado y el desgaste que presentaban las losas anteriores.
Por otra parte, la Asociación de Vecinos de la Ciudad Vieja sigue con su campaña de captación de socios y en breve se echará a la calle y a las redes para ello.