La víspera de Nochebuena ya suele generar atascos de por sí, pero si a las compras de última hora se le suma la presencia de lluvia y de accidentes, se genera un cóctel perfecto de retenciones, caos de tráfico y dificultad para moverse en transporte público. Un siniestro en Alfonso Molina sobre las 14.45 horas obligó a la Policía Local a acudir al lugar para aliviar las largas colas que llegaban hasta los juzgados. Un camión ocupaba uno de los carriles en dirección salida de la ciudad, lo que también hizo que el resto se congestionasen. A la misma hora, en la carretera de Baños de Arteixo, otro accidente produjo un nuevo embotellamiento en sentido entrada a la urbe.
El mediodía fue complicado en varios puntos de la ciudad, como la zona de la plaza de Ourense. La fuerte lluvia hizo que los coruñeses que acudieron a la plaza de Lugo para apurar la compra de regalos buscasen acceder a un bus o taxi, lo que también dejó una imagen de largas colas en las paradas. Tras una “mañana terrible” y un rato de “tranquilidad” a primera hora de la tarde, informan en la sala de pantallas de la Policía Local, volvió el “colapso”. El protagonista de los atascos tiene nombre y apellidos: Marineda City.
El centro comercial está recibiendo durante toda la tarde un constante goteo de vehículos, por lo que el acceso a A Coruña se hizo complicado por momentos. El segundo punto más conflictivo de la tarde en cuanto a los atascos es Ramón y Cajal, en las inmediaciones de El Corte Inglés.
Los Bomberos tuvieron que acudir a varias zonas de la ciudad debido a las inundaciones que se produjeron por la intensa lluvia. Así, en la avenida de La Marina, la calle del Arquitecto Rey Pedreira y la plaza de Pablo Iglesias, entre otras, fueron escenario de actuaciones para achicar agua tras las riadas. En Primo de Rivera se formó una balsa de agua en la carretera que impidió incluso el normal funcionamiento de los autobuses.
¿Y qué tiempo hará esta Nochebuena? Las intensas precipitaciones persistirán durante las primeras horas de la jornada, para dar paso a lluvias intermitentes. El mercurio marcará máximas de quince grados y mínimas de trece. En Navidad habrá mayor estabilidad.