La semana pasada, el juzgado de lo mercantil de A Coruña estimaba la extinción de todos los contratos de los trabajadores de Alu Ibérica. Aún así, desde la Xunta de Galicia aseguran que continúan buscando una alternativa para la factoría, pero vinculada al aluminio secundario, tal y como aseguraba ayer el conselleiro de Economía en funciones, Francisco Conde, durante una intervención en A Coruña.
No obstante, durante su intervención, Conde aprovechó para culpar de la situación de cierre de la planta alumínica al Gobierno estatal. “Lamentablemente, el Gobierno ha conseguido su objetivo”, criticaba el también vicepresidente segundo en funciones, que continuaba cerrando más su crítica apuntando que dicho objetivo era “cerrar Alu Ibérica y que en Galicia no se produzca aluminio primario”. Apuntaba también que la situación para los empleados es de “no retorno”.
Conde volvió a recordar que su posición es la misma que hace unos meses. Es decir, que la solución pasaba por “un precio energético equiparable al resto de países europeos”, algo que apuntaba como clave para pensar en mantener la producción de aluminio primario.
Debido a ese precio, desde la Xunta se centran en buscar una solución relacionada con el aluminio secundario. Es por ese motivo que Conde asegura que se ha elaborado un “cuaderno de venta”, el cual se estaría trasladando a posibles inversores, con el fin de identificar “alguna actividad industrial”.
Por tanto, se están “estableciendo contactos con socios industriales que puedan trabajar con aluminio secundario” con el objetivo de dar una salida a “todos los trabajadores vinculados a Alu Ibérica que quieran tener una alternativa industrial”, explicaba Conde.
La subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, no tardaba en dar respuesta a las críticas del conselleiro, incidiendo en que es el Gobierno gallego quien tiene “las competencias exclusivas en materia de industria”.
“El Gobierno de España y el Ministerio de Industria han estado desde el principio buscando soluciones, siempre al lado de la plantilla para mantener los puestos de trabajo y la actividad industrial”, defendió Rivas.
El auto del juzgado emitido la pasada semana aceptaba la extinción de los poco más de 300 contratos de trabajo existentes en el momento en la planta de aluminio coruñesa.
La fecha máxima para hacer efectiva dicha extinción era la de la jornada de hoy, 10 de mayo, según el auto judicial del mercantil. l