La alcaldesa, Inés Rey, ha tratado por todos los medios de calmar el revuelo que ha levantado la dimisión de Juan Díaz Villoslada, uno de los concejales con más peso en su gobierno: dirigía las concejalías de Urbanismo, Infraestructuras y Movilidad. De momento, asume ella todas las competencias. “Cuando toque, una vez que se determine quién va a llevar cada área, esas personas asumirán esas funciones”, declaró. No quiso confirmar si será el consejero de estas tres áreas, Francisco Díaz Gallego, quien ocupará el puesto, aunque todas las fuentes consultadas lo dan por sentado. De ser así, tres concejalías pasarían a ser gestionadas por este arquitecto y urbanista en lo que sería el tercer cambio de equipo del mandato de Inés Rey.
El más probable candidato a ocupar el puesto tiene 34 años y tres hijos y está doctorado en Arquitectura. Casi toda su carrera la ha desarrollado en estudios como el de su padre, Alfonso Díaz Revilla, reputado, entre otras cosas, por haber fundado la Oficina de Planeamiento. Igual que él, Díaz se decantó por la especialidad de Urbanismo (Villoslada es abogado), y quienes han trabajado con él en algunos de los equipos de proyectos municipales reconocen que tiene un vasto conocimiento en ese campo.
Se trata de la tercera reforma del equipo de gobierno de Inés Rey, que encara en un mandato agitado
El punto flaco de Díaz es la gestión, dado que no había ocupado ningún cargo público hasta ahora. “Hay un cierto déficit en ese sentido, pero ya tiene una experiencia de estos tres años”, manifiestan fuentes municipales. Militante socialista desde hace diez años, concurrió a las municipales en el puesto número diez de la lista, y también cuenta con la ventaja de que es próximo al núcleo duro del Gobierno socialista, y muy cercano a la concejala Yoya Neira, lo que le evitará problemas de aislamiento como los que denunciaba su antecesor tras hacer efectiva su dimisión.
Otro aspecto que le diferencia de Villoslada es el carácter: mientras que el primero era conocido por su talante muy calmado, incluso en el fragor de los plenos, Díaz tiene fama de genio vivo. “Es temperamental”, reconocen quienes lo han tratado, Este genio asoma a menudo en las reuniones de equipos y en su perfil de Twitter, en el que es muy activo. Entre otras cosas, para promocionar las últimas obras de su área o para comentar los platos que realiza, dado que es aficionado a la cocina, y no duda en enzarzarse en responder a las críticas de la oposición, sobre todo al PP.
Uno de sus últimos tuits, en los que combinó ambos intereses resultó polémico: “Estoy para casar… Tanto te quito 15 plazas de aparcamiento como te hago unas orejas…”. Aquello molestó a más de uno, y su perfil se llenó de comentarios de ciudadanos resentidos por las dificultades que encuentran a diario para aparcar. “Hay que ser gañán para reírse así uno de los mayores problemas que has generado en esta ciudad. Inútil”, le reprochaba uno.
También en Twitter publicó una despedida a su concejal el martes: “Muy agradecido a Juan Villoslada por el trabajo de estos años a su lado en Urbanismo, Vivienda, Infraestructuras y Movilidad. La ‘hectárea’, como la conocíamos los compañeros”. Díaz reconoce que la etapa de Villoslada ha sido “intensa” pero apoya sin fisuras a Rey y “un modelo de ciudad del que formamos parte con el resto del gobierno y con la alcaldesa a la cabeza”.
La incorporación de Díaz al equipo de gobierno de Rey debería realizarse de forma oficial en el primer jueves de abril, cuando se celebrará el primer pleno ordinario. No será la primera vez que ocurre. El agitado mandato de Inés Rey ha visto ya dos cambios en el hemiciclo. En 2020, se incorporó Mónica Martínez al Gobierno local como nueva responsable del área de Deportes. Martínez dejó el partido por el que se presentó a las elecciones, Ciudadanos, a principios de verano y, a la vuelta de vacaciones, anunciaba su incorporación al Ejecutivo.
Juan Ignacio Borrego entregó Deportes a Martínez y pasó a hacerse cargo de Turismo y Seguridad Ciudadana., mientras que Jesús Celemín abandonaba Cultura (que a día de hoy sigue llevando Inés Rey) y se quedaba con Educación y Memoria Histórica.
Pero en noviembre, estallaba una crisis aún mayor: un problema interno en el PSdeG hacía que Rey retirara todas las competencias a la concejala de Innovación, Industria y Empleo, Eva Martínez Acón, aunque la edil mantiene su acta. Y la disciplina de voto, puesto que solo acude al pleno para votar. Pero tras haber perdido la Secretaría General de la Agrupación a manos de Inés Rey el pasado domingo, puede que le sea más difícil conservar su puesto en el Ayuntamiento.