Cada año se alejan más de la cocina los coruñeses en Nochebuena, en una clara evidencia del cambio de hábitos y ritmos de la sociedad moderna. Lo dicen tanto la percepción como las cifrass de ventas de los principales beneficiados de esa tendencia: los establecimientos encargados de realizar menús especiales tanto para Nochebuena como Fin de Año. Cifran entre un 30 y un 50 por ciento el incremento de ventas respecto a 2022, y de más de un 100 por cien si se toma como referencia 2021.
Antía López es propietaria de La Tartera Catering de Juan Flórez. A diario se encarga de dar servicio a cientos de personas de los que, asegura, muchos no tenían en sus planes comprar comida para llevar hasta minutos antes: "Muchos se van a trabajar contando comer en casa, pero a la vista del nivel de trabajo deciden que es más cómodo venir". La hostelera cree que la clave está en conciliar la producción propia con la calidad por encargo. "El truco está en combinar comida barata, como una pechuga que te haces a la plancha, con mi producto, que te vas a satisfacer y no sólo a llenarte", dice. "No te vas a poner a cocinar unas lentejas, y una cosa es saciar el hambre y otra una sensación de plenitud".
Nochebuena es para La Tartera el día fuerte del año, por encima de Nochevieja y Reyes. Hoy dispensará más de medio centenar de pedidos para una media de entre 4 y 6 comensales cada uno. El salpicón y el pulpo con langostinos son las preferencias de unos clientes que se dejarán entre 20 y 25 euros por cabeza.
También en Juan Flórez, La Mejorana lleva semanas con un cartel informativo sobre el menú navideño en plena acera. Es el sexto año de servicio y su propietario, Ángel Veiga, jamás había visto una tendencia semejante en el volumen de encargos. "Estamos por encima del 50 por ciento de incremento solamente respecto al año pasado", advierte. "Es una tendencia generalizada todo el año: La gente joven no está dispuesta a cocinar e igual las abuelas son ya muy abuelas", agrega el hostelero, que dará salida a unos 200 encargos para el día de hoy. "El producto estrella son las tablas de queso, de embutidos, los tartares y las carrilleras o paletillas de cordero", subraya Veiga, que sitúa en 35 euros por cabeza y 6 comensales el ticket medio.
No puede ser más revelador el nombre de 4 Caminos Comida Para Llevar, un pequeño establecimiento de la calle del Alcalde Marchesi que ofrece cada día más de 20 opciones y menú del día a sus clientes. Sin embargo, el ritmo de trabajo de estos días no tiene parangón el resto del año. "La gente trabaja y las mamás están cada día mayores", indica Isa Galán. "Hace unos años se compraba en sitios muy concretos, hoy somos muchos", añade.
El salpicón, las carrilleras y el cochinillo son la petición más repetida por el centenar de clientes que darán de comer a entre 4 y 6 personas cada uno. Al igual que sus compañeros Galán sitúa el precio medio por cabeza alrededor de 30 euros.